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Colombia tributa menos que otros países de la OCDE, pero las cargas tributarias son disparejas


Colombia tributa menos que otros países de la OCDE, pero las cargas tributarias son disparejas
Actualizado: 14 agosto, 2018 (hace 6 años)

La carga tributaria total en Colombia es del 27 % del PIB, mientras que la promedio en países de la OCDE es 35 %. Sobre los componentes de la tasa efectiva sobre el capital, los hogares participan con el 11 % y las sociedades con el 89 %; lo que deja ver una distribución dispar de los impuestos.

En la publicación Reportes del Emisor, del Banco de la República, de junio de 2018 titulada ¿Cuánto se tributa efectivamente en Colombia?, los investigadores Hernán Rincón y Martha Delgado explican la importancia de conocer cuánto tributamos, lo que sirve para entender el impacto de los impuestos sobre el consumo, los costos de producción, la inversión privada, el crecimiento económico y la distribución de la carga tributaria. «De igual forma, es clave para la toma de decisiones de política tributaria», dice el reporte.

Rincón y Delgado calculan para Colombia las tasas efectivas promedio de tributación netas sobre el consumo y los ingresos de los factores trabajo y capital entre 1994 y 2016. Para este último año la tasa sobre el consumo fue de 11,2 %, sobre los ingresos de trabajo de 20,8 % y sobre los ingresos de capital de 21,4 %.

La tasa sobre los ingresos de trabajo es la suma de las tasas sobre los salarios de 2,2 %, las contribuciones sobre la nómina de 2,6 % y la seguridad social de 15,9 %. La tasa sobre los ingresos de capital es la suma ponderada de las tasas sobre los hogares de 6,2 % y las empresas de 31,1 %.

Carga tributaria de Colombia versus OCDE

La publicación parte de la premisa de que la carga tributaria total en Colombia es del 27 % del PIB, mientras que la promedio en los países de la OCDE es 35 % del PIB. Entre 1994 y 2016, el promedio de las tasas sobre el consumo y los ingresos de trabajo y de capital son 10,7 %, 18,6 % y 15,4 %, respectivamente. «En términos relativos, las tasas son menores que las del promedio de los países de la OCDE», dice el informe.

La tasa sobre los ingresos de trabajo se reparte entre una tasa promedio sobre los salarios de 1,9 %, por contribuciones sobre la nómina de 2,8 % y por seguridad social de 13,8 %. La tasa ponderada sobre los ingresos de capital se reparte entre la tasa promedio sobre los hogares de 4,8 % y sobre las empresas de 22,4 %. La carga tributaria sobre los salarios y el capital de los hogares son mucho menores que sobre el ingreso de capital de las empresas, resultado contrario al de los países de la OCDE.

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Al examinar los diferentes componentes de la tasa efectiva sobre el trabajo, la tasa sobre la seguridad social participa en promedio durante el período con el 75 %, las contribuciones sobre la nómina con el 15 % y los salarios solo con el 10 %. Para 2016 las participaciones son 76 %, 13 % y 11 %, respectivamente.

Rincón y Delgado frente a lo anterior destacan tres hechos: la importancia de los aportes a la seguridad sobre la carga tributaria de trabajo; la baja carga sobre los salarios y la participación de las contribuciones sobre la nómina en la carga sobre el trabajo no es menor. Al respecto, el informe afirma que «los aportes a la seguridad social y las contribuciones sobre la nómina encarecen de manera significativa el factor trabajo, desincentivan su uso y promueven el empleo por cuenta propia y la informalidad».

Balanza tributaria dispareja

“En nuestro país se tributa menos que en los países de la OCDE y existe una repartición dispareja de las cargas tributarias entre consumo, trabajo y capital, así como dentro de ellas”

Sobre los componentes de la tasa efectiva sobre el capital para el año 2016, la de los hogares participa en promedio con el 11 %, mientras que la de sociedades lo hace con el 89 %; con lo que se concluye que existe una distribución dispar de la carga tributaria sobre el capital de las empresas; lo que significaría una recomposición hacia una mayor tributación por parte de los hogares.

En nuestro país se tributa menos que en los países de la OCDE y existe una repartición dispareja de las cargas tributarias entre consumo, trabajo y capital, así como dentro de ellas. «Asimismo, existen cuantiosos gastos de consumo e ingresos de trabajo y de capital que no pagan impuestos, o pagan menos de lo que ordena la normatividad. Las razones están relacionadas con los beneficios tributarios, la elusión y la evasión. Además, los aportes a la seguridad social y las contribuciones sobre la nómina representan una carga tributaria importante sobre el trabajo», se afirma el informe.

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