En algunas sociedades, con mucha ligereza se usa la figura del Representante Legal Suplente, pues cualquier clase de ausencias del principal, se pretende suplir con el Suplente, cuando su participación debe ser muy excepcional.
Una vez disuelta una sociedad, los socios o accionistas en algunos casos siguen teniendo unos derechos y obligaciones ligados a la liquidación, pero la gran responsabilidad queda en cabeza de liquidador designado.
Es obvio que una sociedad mercantil siempre buscará aumentar ganancias pero reducir costos, una alternativa, es que sus mismos dueños, laboren en la sociedad, como podría ser el caso de un accionista-contador, sin generar ningún tipo de inhabilidad.
Se están presentando casos de Contadores Públicos que aparecen registrados cómo Revisores Fiscales o ejerciendo como Contadores, de empresas con las que nunca han tenido vínculos. Lo anterior no sólo le puede acarrear problemas con la Dian, sino también Disciplinarios y hasta penales.
El Revisor Fiscal y el Representante Legal los nombra el Máximo Órgano Social, en algunos casos la Junta Directiva nombra al Representante. En todo caso, su renuncia, revocatoria y nombramiento de uno nuevo lo hace el órgano que lo nombra, pero si dicho órgano es renuente a hacer el cambio ante Cámara de Comercio o simplemente no se reúnen. ¿Qué se puede hacer?
Generalmente en los estatutos de una sociedad mercantil o entidad sin ánimo de lucro, se establecen unas limitantes al Representante Legal o Gerente para celebrar determinados contratos o negocios. ¿Qué tanta validez tiene el contrato que celebró el representante desbordando su capacidad estatutaria?
A diferencia de otro tipo de entes societarios, en las sociedades de Responsabilidad Limitada sus asociados pueden hacer inspección de libros y documentos de la sociedad en cualquier época del año, incluso a través de un delegado.
Si bien, todos los días del año el Contador, que funge como tal, o cómo Revisor Fiscal, debe llevar adecuadamente los Libros de Comercio, es sin lugar a dudas los 3 primeros meses del año, cuando tienen más ojos encima: de Socios y Accionistas.