Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
* Foto: abceconomia.co
El nuevo presidente del Consejo Gremial Nacional y, en la actualidad, de Asobancaria, Santiago Castro, afirma que el gremio no se opone a la reforma tributaria, pero esta plantea elementos que pueden ser nocivos para el buen desempeño del sistema y la economía.
El 6 de diciembre de 2016, el Consejo Gremial Nacional, por decisión unánime, eligió al economista y politólogo Santiago Castro como su nuevo presidente. Este agradeció por la confianza brindada y manifestó que planea fortalecer el sector privado y la articulación de este con el Gobierno.
Castro continuará siendo el presidente de Asobancaria y desde enero de 2017 asumirá la presidencia del Consejo, que reúne 21 gremios en representación de los sectores más productivos del país y sobre los que recae el mayor número de empleos.
Uno de los retos que enfrentará el dirigente es la reforma tributaria: «No existe oposición a la reforma, porque sabemos de la necesidad que tiene el país de que sea aprobada. Sin embargo, el documento presentado por el Gobierno contiene elementos que pueden ser nocivos para el buen desempeño del sistema y la economía».
Castro afirma que el sector financiero está convencido de lo necesaria que resulta una reforma tributaria estructural y que, si bien el actual no sería el ambiente más oportuno para tramitarla, en realidad no existe otro momento: «Si al final de año el país no muestra a los mercados una señal contundente, con una reforma tributaria estructural que tenga principios de equidad, eficiencia y competitividad es muy probable que pierda su grado de inversión y ese costo sería mucho más impactante y más nocivo para la economía».
Para el nuevo presidente del Consejo Gremial Nacional, la reforma sí contiene algunos elementos estructurales: «pero pienso que también se han colado algunas propuestas que deberían revisarse a fondo. Muchas de ellas vemos como, a través de las discusiones que se han venido dando, se han ido moderando o transformando». Además,Castro agregó: «La idea es que el documento final le entregue al país una guía tributaria mucho más sólida y que ayude a la economía a ser más competitiva».
Por otra parte, el dirigente gremial calificó a la medida que se incluyó en la reforma tributaria para que el 4×1.000 prosiga de manera permanente como un gran inconveniente para el sector bancario. «Es la primera vez que el Gobierno habla de dejar ese impuesto que se creó para que fuera transitorio y de cuyo marchitamiento se venía hablando año tras año».
Según Castro, aunque este tema no ha sido muy comentado por la opinión pública, la cantidad de transformaciones propuestas al Estatuto Tributario tendrá un gran impacto en dicho sector, uno de los que impulsa la economía del país: “Con el 4×1.000 de carácter permanente no se avanzará rápido en la tarea de bancarizar a los colombianos”.
Para el dirigente, la medida afectará las metas de reducción del uso de efectivo propuestas en el país, que planean disminuir dicho indicador de un 11,7% en 2014 a un 8,5% en el 2018.
Como aspectos positivos de la reforma tributaria, Castro destaca la posible eliminación de la sobretasa al CREE, medida que hace más transparente la tributación. «Creo que el objetivo expuesto de bajar la tributación a las personas jurídicas es algo que tenemos que reconocer; el problema es que en la práctica, cuando se va al desarrollo del articulado no es tan visible qué tanto baja la tributación, porque no solamente se trata de la tasa, es la base y esa combinación de tasa y base, para algunos sectores, puede estar dando más tributación efectiva que la que tenían en este momento, así no se compagina el objetivo con las implicaciones reales del articulado».
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