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Contadores están altamente expuestos al mundo del dinero, por lo cual necesitan un fuerte humanismo – Hernando Bermúdez Gómez


Las propuestas del Consejo Gremial Nacional en materia de educación son: identificar, con la ayuda de los gremios, las competencias y habilidades necesarias en cada sector productivo; construir planes de estudios flexibles y pertinentes, que involucren al sector privado; capacitar de forma permanente a los profesores; profundizar la formación dual; actualizar los métodos de enseñanza; diseñar y realizar programas de capacitación y entrenamiento al interior de las empresas; establecer la enseñanza en TIC como prioridad desde la política pública; implementar el Plan Nacional de Bilingüismo, en concordancia con las necesidades de las empresas; y fortalecer la educación financiera dentro de los planes de estudio en los colegios.

Creemos que hoy, como ayer, la educación requiere servir para el desempeño personal, tanto como forma de subsistencia, como de realización. No está bien mirar a los seres humanos como un recurso más; en muchísimas empresas las personas son tratadas según la cantidad de dinero que producen. De esta manera, miles de personas son iguales a otras cosas inanimadas.

La formación especializada tiene grandes ventajas, pues permite lograr resultados que, sin altos niveles de dominio, no son posibles. Sin embargo, el trato humano depende más del conocimiento de este individuo, pues el humanismo, en toda su extensión, hace compresible el mundo, permite admirarlo y formar valores claros.

La gran diferencia entre los contadores estadounidenses y los colombianos está en los años que se cursan usualmente en los colleges para obtener el título de bachiller en artes o en ciencias. Con el recorte que muchos establecimientos están haciendo a la educación superior en Colombia, esta perderá más calidad, especialmente en cuanto al humanismo se refiere.

Muchos no se dan cuenta de las oportunidades que se derivan de la lectura, de las películas, de los viajes, de las tertulias con personas más cultas, de los conciertos, del teatro, de la formación en estética, del conocimiento de la anatomía, la geografía, la ecología, la astronomía, la química, la física, la historia, las matemáticas, la filosofía, la gramática y otras tantas que ahora no nos vienen a la mente. Todo individuo debe ser formado como ciudadano para participar políticamente. Sin esos saberes, poco importa que sea un gran técnico, tecnólogo o profesional, pues no sabrá apreciar al hombre sino al dinero que le permite satisfacer sus propias necesidades; nunca mirará las cosas a nivel mundial, buscando el bien de toda la humanidad.

Los contadores están altamente expuestos al mundo del dinero, razón por la cual necesitan de un fuerte humanismo. Deben tener un gran poder de discernimiento sobre los hechos económicos, de manera que puedan percibir si son justos o no. De poco vale que sirvan medir bien tanto lo justo como lo injusto, como si se tratase de lo mismo.

Hernando Bermúdez Gómez
Editor Contrapartida, Novitas, Registro Contable, Vademécum
Tomado de Contrapartida – De Computationis Jure Opiniones
Número 3685, julio 16 de 2018

Hernando Bermúdez Gómez
Las publicaciones “Contrapartida” son escritas por miembros de la comunidad académica del Departamento de Ciencias Contables de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Pontificia Universidad Javeriana.
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