Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Los inventarios son activos que se tienen con el propósito de ser vendidos, transformados o utilizados en la prestación de un servicio.
¿Los inventarios retirados para obsequiarse a los empleados pueden seguirse calificando en dicha categoría? ¿Cuál es su tratamiento contable?
La respuesta aquí.
¡Pero eso no es todo!
Existen situaciones en que algunas entidades en celebraciones de navidad, cumpleaños, aniversarios u otra ocasión especial extraen de su mercancía inventarios como presentes hacia sus empleados, proveedores o incluso clientes.
Por lo que surge la pregunta: ¿cómo es el reconocimiento contable de los inventarios extraídos con el propósito de ser regalados?
Para responder esta inquietud supondremos que un supermercado desea preparar una ancheta navideña con su mercancía como regalo para sus empleados.
Para este caso la mercancía (antes de ser retirada) cumple con las siguientes condiciones:
Debe señalarse que los inventarios son activos que se tienen con el propósito de ser vendidos, transformados o utilizados en la prestación de un servicio. Puede corroborarse que la mercancía está clasificada como activo y además puede clasificarse como inventario, pues de acuerdo con las definiciones de la NIC 2 y de la sección 13 del Estándar para Pymes, los inventarios son activos que se adquieren con la finalidad de ser vendidos en el ciclo normal de las operaciones del negocio, bien sea en forma de materias primas o de producto en proceso de transformación para su posterior venta, como también en forma de materiales, repuestos, suministros, etc., para ser utilizados en procesos productivos enfocados a ventas posteriores
Ahora bien, ¿qué es entonces un regalo o una muestra gratis? ¿Puede acaso homologarse su definición con la de inventario? Puede decirse que este tipo de presentes, productos que se entregan con el fin de fidelizar a un cliente, o en este caso de homenajear al empleado, no cumplen con la definición de inventario, pues no generarán beneficios futuros.
Cabe anotar que el tratamiento que se da a esta situación es similar a como se tratan las cortesías, muestras gratis o regalos a proveedores. Por tanto, en el momento en que se extraiga la mercancía, se debe dar de baja del inventario; para esto se debe acreditar la cuenta de inventario y se debe debitar con una contrapartida de naturaleza de gasto.
La ampliación de este y otros casos particulares la encontrarás en nuestro Especial Actualícese Tratamiento contable de los inventarios, donde se explican las generalidades, mediciones, sistemas de control y métodos de valuación, entre otros aspectos clave para el tratamiento de los inventarios, importante partida de los estados financieros.
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