Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Andrés Cortés, Luis Álvaro Pardo y Federico Lewin comparten sus puntos de vista sobre las estrategias que debe implementar el Gobierno para aumentar el recaudo tributario, de manera que el país no corra el peligro de que las calificadoras de riesgo le disminuyan su calificación crediticia.
Andrés Cortés, director del área de derecho tributario y cambiario de Cuberos Cortés Gutiérrez afirma que la Dian debe reforzar su tarea de perseguir a los deudores con sus labores de cobro.
“No obstante, encubiertos dentro de los deudores de baja cuantía o de prendas no interesantes se encuentran muchos contribuyentes que pasan desapercibidos por la falta de seguimiento del Estado”, afirma en diálogo con Actualícese.
Otro punto a tener en cuenta para incrementar el recaudo sería aumentar las actividades de fiscalización. Para Cortés, de nada sirve que la base de contribuyentes sea ampliada con cada reforma tributaria, si la obligación fiscal no se cumple como es debido, y menos cuando su cumplimiento no está sujeto a verificación.
“Cien mil nuevos contribuyentes que eluden su carga tributaria es lo mismo que mantener la misma base contributiva de años anteriores”, dice.
Por otra parte, efectivizar el recaudo en todas las actividades de la administración se hace urgente. Las multas ambientales, las sanciones de las contralorías, las sanciones de tránsito y todos aquellos rubros en los que el Estado es acreedor deben ser objeto de recaudo inmediato.
Desde el punto de vista de Luis Álvaro Pardo Becerra, economista, especialista en derecho minero-energético y derecho constitucional, y miembro de Justicia Tributaria, las firmas calificadoras de riesgo mantienen una opinión negativa alrededor del tema del recaudo en Colombia.
“La Ley de financiamiento, antes de declarada su inexequibilidad, se aprobó para salir del paso, para enfrentar un problema de corto plazo, coyuntural para pagar favores electorales, pero no aporta soluciones estructurales y definitivas para construir una economía en equilibrio fiscal o de finanzas sanas”, critica en Actualícese.
Para Pardo Becerra, el problema es que el camino escogido por los últimos gobiernos para elevar el recaudo está agotado.
“Pocas veces, como ocurrió con la Ley de financiamiento, la opinión pública interesada en asuntos tributarios, centros académicos, la bancada alternativa en el Congreso y organizaciones sociales habían expresado, cada vez con mayores argumentos, su vehemente rechazo a los privilegios corporativos y a la inequidad profundizada por la reforma”, puntualiza.
Para él, la única solución sostenible es una reforma tributaria estructural que incorpore los principios establecidos en la Carta Política, y cuya distribución contribuya a la construcción de una sociedad equitativa.
“Seguir esperando que el petróleo y la minería saquen al país de la actual situación es seguir pensando con el deseo de la escuela neoliberal”, opina.
Federico Lewin, asociado de Lewin & Wills Abogados, dice en diálogo con Actualícese que existen varios mecanismos de recaudo, como el impuesto al patrimonio o la sobretasa de renta para el sector financiero, que parecerían pensados para mejorar el recaudo en los próximos dos o tres años.
“También existen otros beneficios o alivios tributarios, los cuales se espera que entren a regir en unos años, como la supresión de la renta presuntiva o la posibilidad de descontar el 100 % del ICA en el impuesto sobre la renta”, explica.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
