Como ya está claro, si el trabajador devenga hasta 2 s.m.m.l.v. en el mes, tiene derecho a la Dotación, vestido y calzado para labores. (Hasta $ 993.800/mes en 2009).
Para los trabajadores que devenguen sumas superiores a los 2 s.m.m.l.v. mensualmente, es voluntario que el empleador entregue la dotación.
Si bien hay empleadores que quieren que todos sus trabajadores estén uniformados, por imagen institucional, así el trabajador gane más de 2 s.m.m.l.v. nunca el empleador puede cobrar dicha dotación por este motivo. Ni siquiera puede cobrar parte de dicha dotación.
Por eso es que nuestro Líder de Investigación Legal, el Dr. Alexander Coral insiste con vehemencia que cualquier clase de dotación está sujeta a la devolución por parte del trabajador en el momento que termina el contrato si el empleador la solicita.
Queda claro que el empleador no puede cobrar la Dotación al trabajador, así no esté obligado a dársela por ganar más de 2 salarios mínimos, si el empleador decide darla a ese trabajador, no puede por ningún medio jurídico cobrarse, “ni siquiera en módicas sumas de cien pesos quincenales”.
No. La Dotación es precisamente para eso, para usarla en las labores diarias del trabajo y si esa labor diaria significa subir y bajar gradas, caminar, agacharse, cargar, etc. es normal que se rompa, se manche, la suela del calzado se desgaste, por lo que si esto pasa antes que llegue la fecha para la nueva entrega, pues el empleador debe darle otra Dotación sin cobrársela al trabajador.
Cosa distinta es cuando por ejemplo el trabajador, que sea personal administrativo y a pesar de la advertencia de no entrar a ciertas zonas de la empresa por ser zonas de pinturas o calientes, por ejemplo, he ingresa contrariando dicha orden y termina untando la Dotación de pintura.
Otro ejemplo sería cuando al trabajador se le entrega el uniforme y calzado, pero al medio día o terminada la jornada de la tarde, se reúne con los compañeros a jugar “Microfutbol” o “banquitas” y rompe el uniforme y daña el calzado de Dotación.
Pues en estos casos, no sólo debe de su bolsillo comprar un nuevo uniforme, sino que además el empleador se puede negar a darle Dotación en la siguiente fecha de entrega, sin contar que de acuerdo a la gravedad, se podría llegar al despido por indebida utilización de los elementos de la empresa.