The Economist publicó recientemente que el gran reto que tiene Colombia es lograr un manejo prudente y eficaz de la economía, buscando un mayor crecimiento, aumentando la tasa interna de ahorro, estimulando la inversión extranjera, controlando el gasto público y acelerando el consumo interno de los hogares colombianos.
Con cifras que indican que el desempleo es del 12,6%, 2.700.000 personas, y el subempleo es del 31%, 7.500.000 personas, se puede decir que un gran peso laboral lo tienen las Pymes, las microempresas y las empresas familiares cuyo universo representa el 60% de la producción nacional, ya que, como lo afirma el columnista Jaime Sanz Botero, las empresas grandes no están generando empleo, pero si incorporan bienes de capital y tecnología que se traducen en mayor producción y productividad industrial.
Ahora, si hay una fuerza que ha impulsado el desarrollo y el trabajo en nuestro país son las Pymes. Sin embargo, gran parte de ellas presentan serios problemas. “De un millón 200 mil empresas, 400 mil están formalizadas y se cae en el error que dicen que están formalizadas cuando únicamente están registradas en Cámara y Comercio”, afirma Mauricio Ramírez, Director Ejecutivo de Acopi Bogotá, en CM&.
Para la ex Senadora Cecilia López Montaño esto es un indicativo para «analizar qué está pasando con la gran empresa colombiana. No basta con facilitar la contratación formal en las Pymes, sino frenar la informalización en aquellas compañías que pueden cumplir con las normas establecidas. Esa es la verdadera responsabilidad social, pagar impuestos y compensar justamente el aporte que hacen sus funcionarios, como lo prevé la ley».
Ramirez también considera que el Gobierno debería pensar en tasas de interés más propicias para acceder a crédito y así estimular la formalización de empleos. “Las tasas deberían estar entre 12 y 13% partiendo del índice de riesgo y sería más justo y fácil para acceder a créditos”, considera Ramírez.
Algunas de las políticas con las que cuenta el Gobierno para que las Pymes mejoren su competitividad y logren formalizarse son:
+ La ley S.A.S., que tiene beneficios que ha permitido la gradualidad en el pago de parafiscales y la expedición del Decreto 3806 de 2009 que asegura la participación de las Pymes en las compras públicas.
+ La aprobación de la nueva ley contable, la cual tiene ventajas para las Pymes. Entre ellas se destaca la reducción en el tiempo para administrar asuntos contables y disminuir costos de transacción.
+ Políticas adelantadas por el Viceministerio de Desarrollo Empresarial, del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, que han dado paso a la creación de centros de desarrollo empresarial, con los que se busca apoyar a los empresarios del sector y a los emprendedores.
Según cifras de BusinessCol, las Pymes generan más del 50% del empleo nacional, significan el 36% del valor agregado industrial, el 92% de los establecimientos comerciales y el 40% de la producción total del país, lo cual demuestra su importancia y su gran potencial de crecimiento. Sin embargo, su aporte a la balanza comercial del país ha sido muy reducida.