Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Inflación: algunos elementos que hay que tener en cuenta para operaciones bajo NIIF


Inflación: algunos elementos que hay que tener en cuenta para operaciones bajo NIIF
Actualizado: 30 septiembre, 2015 (hace 9 años)

Aquí hablaremos sobre...

  • ¿Qué es la inflación?
  • ¿Cómo puede catalogarse la inflación?
  • Ajustes para entidades que aún conservan partidas por inflación
  • Pérdida por deterioro en activos que se actualizan por hiperinflación

Para las empresas que aún conservan partidas ajustadas por inflación o aquellas que sostienen relaciones con otras que operan en economías hiperinflacionarias, hay varios aspectos importantes a tener en cuenta para el tratamiento bajo NIIF, vea aquí algunos puntos clave.

¿Qué es la inflación?

La inflación es un incremento sostenido y generalizado del nivel de los precios de bienes y servicios existentes en un mercado, durante un período específico, por lo general de un año; cuando esto pasa, el dinero pierde su valor, pues este depende de la cantidad de bienes o servicios que se pueden comprar con él; en otras palabras, la inflación es el reflejo de la disminución del poder adquisitivo de la moneda, pues si los precios aumentan, el dinero alcanza para comprar una cantidad menor de bienes y servicios.

En Colombia, la inflación se calcula a través de la variación del Índice de Precios al Consumidor –IPC– que mide el cambio mensual promedio en los precios de una canasta de bienes y servicios que representa el consumo de los hogares nacionales.

¿Cómo puede catalogarse la inflación?

Por otra parte, dependiendo de la magnitud del aumento en la inflación, esta puede clasificarse en varias categorías:

  • Hiperinflación: ocurre cuando se presenta alza exagerada en el precio de los bienes y servicios, que puede alcanzar tasas de crecimiento de hasta cuatro dígitos (1000%).
  • Inflación galopante: se presenta cuando existen incrementos en el precio de los bienes y servicios, en tasas de entre dos y tres dígitos. Cuando se presenta este tipo de inflación, al ver afectado el poder adquisitivo, los consumidores intentan comprar los bienes y/o servicios vitales y necesarios para el sustento.
  • Inflación moderada: se presenta cuando hay un incremento paulatino en los precios de los bienes y servicios. Por lo general, la inflación se mantiene en tasas de un dígito, por lo que puede considerarse que los precios de una economía con este tipo de inflación, son estables.

Ajustes para entidades que aún conservan partidas por inflación

Algunas compañías con larga trayectoria, pueden sostener a la fecha en sus estados financieros, información relativa a partidas correspondientes a ajustes por inflación.

De recordarse que hasta el año 2007 fue obligatorio ajustar las cifras de los estados financieros de acuerdo con las variaciones en el valor de la inflación nacional, la principal finalidad de esta operación era brindar información requerida por efectos fiscales; sin embargo, cuando el fisco nacional dejó de requerirla, la contabilidad también dejó de hacerlo.

En el actual proceso de convergencia, si en la tarea de revisión de los componentes de los estados financieros se encuentra que la empresa en cuestión tiene partidas de años atrás que están afectadas por ajustes por inflación, para la elaboración del Estado de Situación Financiera de Apertura debe evaluarse si el valor ajustado por inflación puede reconocerse como parte de la partida en cuestión; por ejemplo, en el caso de ajustes por inflación sobre mejoras en propiedad ajena debe evaluarse la posibilidad de hacerlas parte de las propiedades, planta y equipo de la organización y darle el respectivo tratamiento estipulado para estos ítems, es decir, se puede medir al valor revaluado en libros, o valor razonable como costo atribuido.

“si se decide aplicar la metodología del valor razonable, no importan los ajustes por inflación o el costo, porque al final se deja al valor del avalúo”

Cualquiera de las dos metodologías de medición es viable; y el manejo de los ajustes por inflación dependerá de la opción que se elija; si se decide aplicar la metodología del valor razonable, no importan los ajustes por inflación o el costo, porque al final se deja al valor del avalúo; pero si se opta por el valor en libros revaluado, se tendrá que tomar la decisión con los ajustes por inflación para saber si se dejan incluidos en el costo del activo o se ajustan con impacto en el patrimonio de la organización.

TAMBIÉN LEE:   Lista de chequeo en Excel para efectuar el cierre contable y fiscal de una entidad

Pérdida por deterioro en activos que se actualizan por hiperinflación

El manejo de las pérdidas por deterioro en activos que se actualizan por hiperinflación, es uno de los temas complejos que pueden generar dudas en la implementación de las NIIF; al respecto, el párrafo 31.8 de la NIIF para pymes, indica que algunas partidas no monetarias se registrarán según sus importes corrientes al final del período sobre el que se informa, tales como el valor neto realizable o el valor razonable, de forma que no es necesario reexpresarlas.

Así pues, si se trata de un activo que se mide a valor razonable, no habrá necesidad de realizar una reexpresión por efectos de la inflación; por ejemplo, las propiedades de inversión se ajustan al valor razonable cada año, y allí no será necesario hacer la reexpresión por efectos de la inflación.

Pero si una vez llegado el cierre del período, hay activos que están medidos al costo, esos activos son ajustados por inflación y, posteriormente, se debe medir el deterioro del valor de esa partida, que es algo totalmente independiente del ajuste por inflación. Lo que la entidad hace es tomar el costo del activo y restarle la depreciación, obteniendo así el valor en libros; ese valor se ajusta por inflación (ajustando el costo y ajustando la depreciación) y se obtiene un nuevo valor, y es este último resultado el que se evalúa para saber si el activo tiene deterioro de valor.

En síntesis, siempre se hace en primera instancia el ajuste por inflación y después se evalúa el deterioro del valor de esos activos que antes se habían ajustado; no se trata de que como el activo se ajusta por inflación, entonces no se hace deterioro; o que como el activo se deteriora entonces no se ajusta por inflación; lo correcto es hacer todos los pasos, ajustando primero por inflación, y luego evaluando el deterioro del valor al activo.

Material Relacionado:

Descubre más recursos registrándote o logueándote. Iniciar sesión Registro gratuito
,