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La firma contable Ernst & Young es la más reciente en caer ante la presión de los reguladores japoneses por el escándalo contable de Toshiba, que ascendió a USD 1,3 mil millones.
La Agencia de Servicios Financieros de Japón dijo que le impondrá una multa de USD 17,4 millones a EY ShinNihon, el brazo local de la firma contable, y suspenderá al brazo japonés de tomar nuevos contratos por tres meses a partir de enero por su responsabilidad en no detectar irregularidades en los libros de Toshiba.
Poco después de la noticia, EY ShinNihon anunció que su jefe ejecutivo Koichi Hanabusa dejará el puesto a finales del próximo mes.
En un comunicado, la firma dijo que asume la penalidad como algo muy serio y tomará medidas para mejorar la calidad de sus auditorías. “Esto es extremadamente lamentable. Hemos implementado severas penalidades internas, incluyendo mi renuncia… para aclarar nuestra responsabilidad”, dijo Hanabusa.
La acción regulatoria contra la firma auditora se produce luego que el vigilante de las acciones en Japón buscó una multa de USD 59,8 millones contra Toshiba. La empresa advirtió de una pérdida anual de USD 4,5 mil millones mientras lidia con las consecuencias de un escándalo contable que reportó beneficios netos inflados por USD 1,3 mil millones en un período de siete años.
La FSA identificó siete contadores envueltos en la auditoría de Toshiba y los acusó de fracasar en usar el debido cuidado y aprobar documentos falsificados como veraces. “Las operaciones de la firma auditora fueron impropias”, dijo el regulador.
Fuente: Financial Times.
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