Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Lo bueno, lo malo, lo feo y el futuro de nuestra profesión


Lo bueno, lo malo, lo feo y el futuro de nuestra profesión
Actualizado: 1 marzo, 2010 (hace 14 años)

Aprovechando la coyuntura del Día del Contador, dialogamos con 14 profesionales, entre Contadores Públicos Independientes, Auditores, Docentes, Revisores Fiscales, Miembros de Agremiaciones, Consultores e Investigadores, sobre lo que vale la pena resaltar de nuestra profesión, en lo que hay que trabajar más y la visión del mañana.

1) Rosa Margarita Roldán, Contadora General de la Nación

«Lo bueno es que a la Contabilidad Pública, desde el año 1991, se le ha venido dando importancia. Buscamos que se le mire con buenos ojos en el sector privado y por eso hemos inaugurado en Bogotá y Medellín la cátegra nacional de Contaduría Pública Edgar Fernando Nieto. Tenemos que seguir promoviendo la cultura contable, mediante la presencia de la Academia.

Lo malo, la falta de unión y división de las Agremiaciones, Asociaciones, Federaciones y Colegios, pero que desde la Junta Central de Contadores estamos trabajando para estrechar lazos y formar un frente común. Lo feo, el trabajo aislado de muchas entidades, pero basados en la unión podemos lograr muchas cosas importantes.

El futuro de nuestra profesión es positivo ya que el Contador tiene muchos campos de acción. Hay mucho que explotar en la parte tributaria, contable y de asesorias. También se están promoviendo capacitaciones y convocatorias para que el nivel de los profesionales crezca».

2) Jaime Hernández, Contador Público, Ex Presidente de la Junta Central de Contadores y Ex miembro del Consejo Técnico de la Contaduría Pública

«La profesión contable colombiana ha sabido sortear obstáculos. Lo bueno del Contador Público es que es una persona batalladora, luchadora, guerrera y se las ingenia para superar los problemas. Esta es una profesión en donde se crea conocimiento propio. Ahora, si se compara con otras, es la que menos profesionales desocupados tiene, o al menos no al nivel que presentan otras. Los gremios han logrado reivindicar modelos que envidian afuera. Es positivo también, que la profesión se ha vuelto femenina.

Lo malo y muy malo es el tema de la desunión. Hay aspectos que amenazan a la profesión como el tema del Decreto 514, nuestra problemática de no tener unas tarifas obligatorias, no hay un control en las Universidades en el número de egresados, no estamos unidos para ser proactivos y participar en escenarios internacionales.

Lo feo es que no se está formando al estudiante de Contaduría Pública de manera adecuada. No se le está creando un amor por la profesión, un sentimiento de defensa. Ellos se están limitanto de reproducir lo que les dice el docente. Veo en las Universidades un desgano y desinteres bastante preocupante.

En cuanto al futuro, es necesario que exista mayor participación, hay que examinar muy bien el papel de las Universidades y que exista unión. Yo veo que cada día nos hacen exigencias y sacan Decretos y no obtenemos a cambio respaldo para nuestro ejercicio, y eso se presenta porque mostramos desinterés. El futuro puede ser difícil si no se cambian los puntos anteriores».

3) Liliam Betancur Jaramillo, Directora Ejecutiva Nacional de la Federación Colombiana de Colegios de Contadores Públicos, Docente del Programa de Contaduría Pública de la Fundación Universitaria Luis Amigó

«Lo malo de la Contaduría Pública es la incapacidad de la mayoría de los contadores de asumir la diferencia como una posibilidad de crecimiento profesional, esto hace que muchos ataquen a las personas y no los argumentos, todo ello en detrimento de la misma profesión, no de las personas como se podría creer. Otro tema dañino es el de las posiciones extremas que no aportan a la profesión y que si en algún momento de la historia fueron la bandera de batalla de algunos sectores en la profesión, hoy en día el extremo es malo para todos. Si bien no es apropiada la adopción acrítica de estándares, tampoco es posible darle la espalda a la globalización, debemos identificar y conciliar diferencias y lograr las condiciones ideales para una profesión nacional con capacidad de internacionalización.

Lo feo es la indiferencia ante las dificultades que arrasan con la profesión contable. La forma como se está manejando el proceso de regulación por parte de la dirección del Ministerio hace de nuestra profesión un dibujo irrisorio de lo que las firmas multinacionales necesitan para seguir acumulando.

El futuro de la profesión es muy incierto, lo seguro es que muy pocos seguiremos preocupándonos por la profesión y aportando desde la construcción de la misma, del conocimiento y de las personas. Los poderosos seguirán buscando su beneficio individual y de pronto ganarán muchas batallas. El resto, que resulta siendo la mayoría, seguirá indiferente y adjudicando responsabilidades y vanagloriando a individuos que bien o mal se preocupan por la profesión, pero esas mayorías nunca harán nada por la profesión nacional y se dejarán arroyar por el producto de las situaciones venideras.

Si nos descuidamos, la aplicación de la Ley 1314 de 2009 será otra apertura a la Globalización realizada a la luz de las necesidades externas y atropellando a los nacionales, sin consultar las necesidades nacionales.

4) Francisco González, Director de Práctica Profesional y de Calidad y Riesgo de Ernst & Young Colombia

«Lo bueno es que es una profesión que le permite al profesional, incluso al estudiante, trabajar, porque tiene muchos campos de acción. Todas las empresas nos requieren y el profesional que se especializa es apetecido. Muy pocos son los Contadores Públicos desempleados o que no están desarrollando la profesión.

Lo malo, la percepción que se tiene del prototipo del Contador. Son pocos los altos directores de las empresas (gerentes o presidentes). Y en cuanto a lo feo, no todos los profesionales valoran su trabajo y terminan aceptando trabajos de alto riesgo y muy baja remuneración.

Mirando hacia el futuro, la profesión en Colombia tendrá muchos desafíos para quienes aceptemos el compromiso de ponernos al día en nuestros conocimientos en Normas Internacionales de Contabilidad y Aseguramiento.

Las empresas aumentarán la calidad de la Información Financiera a reportar y los Contadores seremos los artífices en gran medida de dicha calidad. Habrá un mayor movimiento de capitales hacia el país y hacia afuera, con lo cual la internacionalización de nuestra profesión será inevitable».

5) Arley Alfonso Álvarez, Contador Público, Especialista en Gerencia de Impuestos, Gerente de PricewaterhouseCoopers Servicios Legales y Tributarios

«Dado que toda actuación económica se ve reflejada en cifras y estas expresan la situación financiera de toda persona, entidad y nación. En todas estas actuaciones está presente la profesión contable interactuando a través de sus múltiples campos de acción; analizando y presentado la información recopilada para la adecuada toma de decisiones, controles, ejecución y administración de recursos. Dicha interacción con la vida cotidiana y demás profesiones manifiestan lo bueno de la profesión.

Lo malo está representado por la subvaluación de algunos sectores, frente a la importancia que representa esta profesión tan valiosa para la economía, dejando de lado el gran esfuerzo que implica todos los procesos desarrollados por cada uno de los profesionales.

Lo feo, como puede suceder en cualquier profesión, está dado por el empleo inadecuado de ésta como herramienta que persigue una distorsión de las realidades económicas o pretenden buscar fines particulares manipulando la información y dejando la Fe Pública en entredicho.

El futuro de la profesión en Colombia, dada su dinámica e interacción, implica retos, modernización y evolución constante, adecuándose con el contexto internacional de tal suerte que constituya un lenguaje universal y sea parte del engranaje productivo de la nación».

6) Rafael Humberto Barrera, Contador Público, Presidente del Colegio de Contadores Públicos de Colombia – Conpucol

«Bueno que exista la Junta Central de Contadores, el Consejo Técnico de la Contaduría Pública, la Contaduría General de la Nación y muchos contadores trabajando por una profesión comprometida con el desarrollo nacional y por una contabilidad que aporte a la productividad nacional, al bienestar social de los Contadores Públicos y del resto de la población colombiana, y que luche por incorporar los avances internacionales en desarrollos científicos. También, que hayamos iniciado el proceso de construcción de una colegiatura con funciones públicas.

Mala, la gestión gubernametal para mantener a los Contadores Públicos como serviles de sus políticas de atraso nacional y como defensores de normas perjudiciales para la nación y los colombianos, como el reciente Decreto Ley 129 de 2010 que recorta los ingresos a los trabajadores independientes. También que un número significativo de Contadores Públicos seamos verdugos de nuestra profesión y hayan puesto talanqueras al proceso de construcción de la colegiatura.

Feo, los atropellos que esta haciendo el Ministerio de Comercio a los Contadores Públicos impidiendo su representación en la actual Junta Central de Contadores, cerrando el Consejo Técnico de la Contaduría Pública, y denigrando de los Contadores Públicos que no somos sumisos a sus planes de tener una contaduría y una contabilidad al servicio de las multinacionales, principalmente de las que tienen monopolizada la prestación de los servicios públicos.

El futuro de la profesión dentro de las actuales políticas públicas es incierto. La Ley 1314 de 2009 le dio herramientas al Gobierno para desalojar la representación de los Contadores Públicos de los organismos de decisión ética y técnica de la profesión y lograr así unos organismos de bolsillo del Gobierno y llevar la participación democrática a una dedocracia presidencial».

7) Juan Fernando Mejía, Contador Público, Docente y Asesor de la Contaduría General de la Nación

«Lo bueno de la Contaduría Pública es el nivel y desarrollo que las mujeres contadoras han demostrado, sobre todo en los últimos años. Hechos como el nombramiento, por primera vez, de la Contadora General de la Nación, Rosa Margarita Roldán. Las cifras y los datos son contundentes. Esto constituye no solo un hecho agradable sino una satisfacción para los Contadores Públicos del género masculino.

Lo malo, altamente relativo, podrían ser las luchas sin sentido que se han presentado entre sectores profesionales, básicamente porque hemos confundido la política gremial con la politiquería. Sin embargo, los Contadores jóvenes están, cada vez más, superando las posiciones extremas frente a temas como las Normas Internacionales de Contabilidad e Información Financiera, acorde con las dinámicas de la globalización y con flujos de información más precisa y cambiante.

Lo feo de la Contaduría podría ser la falta de control a la oferta, es decir, el inadecuado uso de la figura de la autonomía universitaria que permite la proliferación de facultades sin el cumplimiento real de mínimos académicos y pragmáticos o sin estudios de impacto. Como toda sobreoferta, la consecuencia es un decremento en el valor razonable, por no decir en el precio, de los honorarios profesionales. Asunto que a mi parecer, no se arregla con tablas de honorarios que, por bien intencionadas que sean, no plantean soluciones de fondo.

Para finalizar, vale la pena resaltar que existen muchas más cosas buenas y bonitas de esta profesión que tanto amamos y que son las que debemos resaltar y mejorar continuamente. Los Contadores debemos seguir estando pendientes de los retos que se plantean en nuestra profesión en campos como la regulación, la tecnología y la reorganización de los organismos legales relacionados. Además, seguir utilizando las herramientas disponibles para interconectarnos y contribuir con el desarrollo individual y grupal».

8) Luis Raul Uribe, Contador Público, Conferencista y Especialista en Administración de Empresas

«Lo bueno es que nuestra profesion es dinámica, me atrevo a decir que integral e interdisciplinaria, con una formacion solida en valores, conocimiento académico, con exigencias profundas en muchos campos, lo que la hace versátil y al contador con mucha proyección.

Lo malo es el estancamiento de algunos colegas y gremios que han desperdiciado históricamente la posibilidad de agremiarse en una sola entidad y haber logrado avances en todo lo relacionado a nuestros temas, tanto en lo profesional como en lo humano, social y proyección gerencial.

Lo feo se observa en lo que algunos han llamado como cierta politiquería en nuestra profesión. Se habla en casos hasta de derecha e izquierda, denominaciones que no entendemos o asimilamos , quienes pretendemos por siempre la unidad gremial, la búsqueda de un mejor estatus tanto para el Contador como para la profesión.

A pesar de ciertos inconvenientes, veo un futuro con esperanza, pues hay posibilidades : Los tratados de Libre Comercio y la convergencia con Estándares Contables Internacionales, entre otros. Estos abren nuevas posibilidades para el profesional contable, sobre todo aquel que tenga proyección gerencial y visión global».

9) Gabriel Vásquez Tristancho, Contador Público, Revisor Fiscal, Conferencista, Columnista y Docente de la UNAB

«Lo bueno es que hay fuerte competencia, lo cual obliga a buscar productos diferenciados y de calidad. Lo malo, las personas negativas y resentidas, jamás saldrán de la pobreza intelectual que las arruina todos los días. Lo feo, los sentimientos ‘cubanistas’ o de izquierda en la profesión, desentonan en todos los foros con posiciones irracionales al pretender nacionalizar el conocimiento contable que es global por naturaleza.

Sobre el futuro, la profesión va de la mano con los desarrollos y liderazgos de los negocios del mundo y de Colombia. Por tanto, todo es oportunidad de crecimiento, tanto es así que la información de negocios cada vez es mas pública (bases de datos públicas, mercados públicos de valores, banca mundial, negocios mundiales). Todos tienen oportunidades, incluso los que se quedaron en el pensamiento instrumental y local del ejercicio cada vez mas distante de la teneduría de libros (book – keeping)».

10) César Enrique Lozano Ramírez, Contador Público Especialista en Revisoría Fiscal y Control de Gestión Especialista en Docencia Universitaria

«Dentro de los aspectos positivos se puede nombrar que esta es una profesion polifacética, que permite actuar y laborar en muchos campos como lo Contable, Tributario, Auditoría, Gestión y Administración, entre otros.

Lo malo, el desgaste personal y el sacrificio de tiempo familiar para cumplir con muchas responsabilidades del ejercicio.

Lo feo, el mal pago de los servicios profesionales, que se da por la misma proliferación de Contadores de todas las Universidades, que aumentan la oferta y compiten deslealmente con las tarifas de los servicios.

En cuanto al futuro de la profesión, se presentan muchas expectativas en la aplicación de las IFRS, que permitirán que los profesionales con mayor compromiso en este aprendizaje, tengan un mejor desempeño, y mayores oportunidades con el cierre de las nuevas políticas tributarias, que cada vez tiene mas contribuyentes».

11) Equipo de trabajo de Nasaudit, investigadores de temas de Auditoría, Revisoría Fiscal y Control Interno

«Lo bueno es que la contaduría es una profesión sobre la cual a su alrededor giran los negocios, en razón a que es la encargada de proveer de información a las compañías para que éstas tomen decisiones, lo cual es el insumo principal de compañías exitosas.

Lo malo, infortunadamente la profesión ha sido calificada durante muchos años como los proveedores de información tardía; es decir, es normal que las compañías en primera instancia realicen sus negocios y después evalúen el impacto que éstas tienen dentro de la información contable. Esta situación es originada porque los profesionales de la contaduría no son partícipes de las decisiones importantes dentro de las empresas.

Lo feo, las universidades no han promovido el cambio hacia la profesión de tal forma que capaciten a los profesionales, no como hasta ahora lo han hecho, para que no únicamente sean los encargados de la teneduría de libros sino profesionales que sean capaces de afrontar desafíos que hoy tiene la sociedad. Una sociedad que camina más rápido que la velocidad de la luz y que requiere que ese insumo importante que es la información financiera sea producto de una participación activa de los profesionales de la contaduría, unos profesionales ejecutivos y no profesionales únicamente técnicos.

En cuanto al futuro, la contaduría es una de las profesiones con mayor proyección tanto en el entorno nacional como internacional, dado que tiene múltiples campos de acción y no únicamente la teneduría de libros, que para nuestro entender, debería ser apartada de los campos de acción de la profesión. Esto en razón a que la profesión requiere de profesionales con capacidades gerenciales para analizar, interpretar y tomar decisiones con base en la información financiera, en el entorno interno y externo en el cual se desempeñan las compañías, esto dado a que, los profesionales de la contaduría son los que, a nuestro entender, conocen mucho más en profundidad las empresas».

12) Oswaldo Pérez, Contador Público, Senior Manager de Impuestos para KPMG Colombia

«Lo bueno de la Contaduría Pública es su gente. Generalmente los Contadores son personas con muchas ganas de salir adelante.

Lo malo, que en Colombia el Contador tiene menos relevancia que otras profesiones, como el Derecho, pero esto es culpa de nuestro sistema educativo ya que en las aulas no se exige una verdadera formación profesional. Por otra parte, la desunión que existe entre los miembros de la profesión es lo que considero feo.

Pareciera ser el futuro de la Contaduría en Colombia es más halagador, ya que con la implementación de las Normas Internacionales de Contabilidad, se va a profesionalizar aún más al profesional de la Contaduría».

13) Hernán Rodríguez, Contador Público, Consultor y Asesor sobre Tecnología de Información Contable y Auditoría de Riesgos Informáticos, Traductor de temas internacionales

«Lo bueno es su gran receptividad a temas planteados por lideres reconocidos, lo malo es su falta de identidad hacia perfiles internacionales y lo feo es la falta de unidad gremial»

El futuro se plantea incierto mientras no se haga un relevo generacional hacia discursos de ejercicio profesional».

14) Javier Mazo, Especialista Organizacional, Asesor de Empresas, Administrador y Docente

«Lo bueno es que cada día hay más profesionales con deseos de prestar un servicio ético y transparente al servicio del país, utilizando tecnologías de avanzada que les permite estar informados permanentemente y prestar un servicio eficiente y oportuno a la empresa y al país.

Lo malo es que no se reconozca en este profesional el significado trascendental de su aporte al desarrollo del país y que se carezca de estímulos profesionales que honren al profesional.

Lo feo es que algunos profesionales se dejen tentar por el dinero fácil y con su proceder, carente de ética y profesionalismo, manchen el buen nombre de quienes proceden en el marco de la sano, honesto y profesional.

El futuro alrededor de un país en permanente desarrollo, expansionismo y diversificación, cada día las oportunidades para el contador ético y de recto criterio profesional, tienen que ser cada vez mejores y de mucho éxito».

Especial Día del Contador Público

Descubre más recursos registrándote o logueándote. Iniciar sesión Registro gratuito
,