Neurofinanzas – Luis Eduardo Olaya

Las neurofinanzas son herramientas tomadas de la neurociencia, que junto con la psicología y la economía permiten evaluar cómo el cerebro interviene en la toma de decisiones financieras. Lo anterior, de la mano de la tecnología, permite confirmar que las decisiones financieras son afectadas en gran medida por las emociones. Esto quiere decir que esta línea de investigación se encuentra relacionada con la economía comportamental, como una visión conductual de la economía.

El tema tiene que ver con las finanzas personales, y busca resolver, entre otras, las siguientes preguntas: ¿por qué compramos lo que compramos?, ¿por qué actuamos como actuamos en nuestras decisiones financieras?, o ¿por qué nos endeudamos tanto?

La economía es una ciencia social que estudia las decisiones que toman las personas para la optimización de los productos escasos, agregando que, por definición, tenemos necesidades ilimitadas, lo cual se traduce en que hay que economizar. Por tanto, todas las decisiones que tomamos son económicas.

Estudios científicos han concluido que el 95 % de nuestro comportamiento es inconsciente, incluidas nuestras decisiones de compra. Esto quiere decir que no sabemos por qué compramos, aunque digamos que sí.
Entonces, dado que todas nuestras decisiones son económicas y, casi por completo, inconscientes, se vislumbra el problema de las finanzas personales y hasta empresariales; recordemos que las empresas son manejadas por las personas.

Este es un tema demasiado amplio y relativamente nuevo, cuyos desafíos tienen que ver con distribución de ingresos y gastos, decisiones de inversión, interpretación de los mercados, elaboración de predicciones, entre otros temas, y cómo resolverlos de manera consciente y racional.

Los entornos cambian rápidamente y, por tanto, es necesario adaptarse rápidamente a cada contexto, hay que discernir y filtrar cada estímulo que llega al cerebro, hacer una pausa y hacerse una pregunta muy sencilla: “¿me conviene?”, para así tener buen juicio y tomar buenas decisiones.

Esto requiere de un trabajo concienzudo para hacer una reprogramación mental, para cambiar la manera en que percibimos las cosas y cómo respondemos a los estímulos.

Un principio básico de las finanzas personales (y, ¿por qué no?, empresariales) es “Controlar el dinero y no que el dinero nos controle a nosotros”; de esto trata esta ciencia. El dinero es un recurso y como tal, está al servicio del hombre; es un medio –de intercambio–, y todo se trastorna cuando se pone como un fin.

Viendo las finanzas con este filtro gigante, ayudará a tomar mejores decisiones, evitarnos problemas y vivir felices, como un objetivo de vida.

El proceso de toma de decisiones financieras puede ser extenuante. En consecuencia, un truco es hacer pequeños cambios que generen grandes resultados.

Luis Eduardo Olaya A., PMP
Contrapartida, Novitas, Registro Contable, Vademécum
Tomado de Contrapartida – De Computationis Jure Opiniones
Número 3882, octubre 15 de 2018