[Editorial] NIIF: la oveja disfrazada de lobo – Juan David Maya Herrera

A casi 6 años de la expedición de la Ley 1314 del 2009, y en el año de aplicación plena para algunas entidades reportantes, es hora de empezar a sentar posiciones sobre lo que ha sido el proceso de convergencia en Colombia. A continuación, algunas líneas provenientes de la observación.

A mediados del 2009, fue expedida la Ley 1314, “por la cual se regulan los principios y normas de contabilidad e información financiera y de aseguramiento de información aceptadas en Colombia, se señalan las autoridades competentes, el procedimiento para su expedición y se determinan las entidades responsables de vigilar su cumplimiento”, y con ella se dio inicio al proceso de convergencia hacia NIIF.

Los rumores no se hicieron esperar: “eso lo aplazan” decían unos, “hay que esperar la reglamentación” decían otros, “eso no va a ser realidad” decían aquellos; pero unos cuantos, calificados como los ‘Quijotes’ de esta profesión, creyeron en el proceso, y continuaron un camino que ya habían adelantado, la larga y tediosa senda de entender las NIIF. Entre estos líderes de nuestra profesión se encontraba Luis Raúl Uribe Medina, abanderado en el tema de las NIIF, pero muchas veces sus palabras habían quedado en el aire, en una conferencia, en una universidad, en un artículo, en una publicación.

Esta vez, distinto de los intentos anteriores (Ley 550 de 1999 y Proyecto de Ley de Reestructuración Económica en el 2006), todo comenzó a marchar. El Consejo Técnico empezó a trabajar y emitió el Documento de Direccionamiento Estratégico para la Convergencia a Estándares Internacionales de Información Financiera, y con ello el proceso empezaba a tener forma.

Posteriormente se expiden los decretos 2706 y 2784 del 2012, con los cuales se establecieron los marcos normativos a aplicar para el Grupo 3 (NIF para microempresas) y para el Grupo 1 (NIIF Plenas), con aplicación obligatoria a partir del 1 de enero del 2015; un año más tarde el Gobierno expidió el Decreto 3022 del 2013, y con ello se da inicio al proceso de convergencia para las pymes, con aplicación obligatoria a partir del 1 de enero del 2016.

Ninguno de los contadores que estábamos siguiendo el proceso fuimos sorprendidos los decretos de las NIIF plenas y NIIF para pymes, pues en el mundo solamente existen dos marcos de referencia en temas de información financiera: las NIIF, aplicadas por más de 120 países y los USGAAP, aplicados por Estados Unidos de América. Y entre ellos, desde hace alrededor de 10 años, las NIIF habían estado ganando terreno en todo el mundo.

Y bien, ¿qué pasó en el ambiente contable?

En el ámbito contable empezaron a aparecer una serie de expertos en la materia, aprovechando el desconocimiento y la falta de preparación de los contadores y empresarios, y formaron todo un ‘terrorismo contable’ del cual hoy todavía muchos no han podido salir.

Y ese es precisamente el objetivo de este escrito, decirle a los contadores, administradores, revisores fiscales, auditores de estados financieros y en general, a todos los usuarios de la información financiera, que las NIIF no son arma de destrucción masiva, que las NIIF no son un lobo, como muchos las han presentado, sino que las NIIF son, más bien, una oveja disfrazada de lobo.

Ya en otros escritos se ha invitado a todos los involucrados con la información financiera para que hagan un proceso consciente de aprendizaje de las NIIF, utilicen los recursos y documentos que hoy en día están disponibles, y de una vez por todas se monten en el cohete de las NIIF.

Les dejo la siguiente pregunta: ¿usted haría curso para manejar nave espacial, si el vehículo que necesita manejar es una moto?

Esto lo digo porque en algunas ocasiones, cuando las personas buscan capacitación, les presentan programas complicados, que abordan las NIIF como un tema demasiado técnico, y le impiden al contador promedio abordar los temas cotidianos que se le presentan día tras día.

Por eso recomiendo: estudie las normas que le aplican a las empresas que usted maneje, busque metodologías que le transmitan conocimiento teórico y práctico, que le respondan a sus inquietudes, que le ayuden a aplicar la sección 11 –Instrumentos financieros en el reconocimiento y medición de su cartera de clientes, etc.

Y bueno, a todos los colegas, los nacionalistas y los internacionalistas, les invito a que nos unamos en este proceso que busca, en el fondo, enaltecer nuestra profesión; solo si nos unimos podremos llevar a nuestro país a aplicar una normatividad globalmente aceptada de manera acertada, y a contextualizarla la realidad colombiana.