Pero así como esa escena puede parecernos muy cómica, la verdad es que algunos seres humanos quieren hacer exactamente eso con sus propias vidas, y allí la situación ya no es graciosa sino delicada.
En efecto, he podido comprobar que algunas personas en nuestro país terminan en la situación de estar recién casados, y con varios niños pequeños, con trabajo de tiempo completo, y al mismo tiempo también deciden ponerse a hacer una carrera universitaria, obviamente en los horarios nocturnos.
Y entre ellos figuran las personas que se dedican al estudio de la Contaduría y la Administración de empresas que son las carreras que más se ofrecen en horarios nocturnos en las universidades de Colombia.
Entiendo claramente que lo que impulsa a una persona a querer hacer una carrera universitaria, bajo ese escenario tan complicado (esposo-padre-estudiante) es su deseo de superación para lograr un mejor nivel de vida. Y ese deseo de superación es digno de admiración.
Pero por mucha juventud y aguante que tenga una persona para hacer tantas cosas a la vez, estoy seguro que en alguna de ellas termina enfrentando regulares o hasta males resultados (esposo o esposa desatendida, o hijos desatendidos y sin cariño, o mala salud por tanto estrés, o una mala preparación académica que luego se reflejará en un mal desempeño profesional que afectaría la imagen de todo el gremio…).
Por ello, es mejor planificar bien nuestras etapas en la vida. Es mejor primero estudiar. Luego sí, después de haber estudiado bien, encontrar un buen lugar de trabajo. Y luego de tener un buen lugar de trabajo, encontrar la esposa ideal y luego tener tiempo y dinero para atender mejor a los hijos. Como quien dice, hacer bien los pasos de “ponerse primero las medias y luego los zapatos”…
Espero que este mensaje lo puedan conocer y aceptar los que aun tengan oportunidad para no dejar que sus vidas se les convierta en la escena que se mostraba en las primeras líneas de este escrito pues con la vida la situación ya no se vuelva graciosa sino compleja.