Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Reducción del pronóstico se debe principalmente a las barreras comerciales internacionales, a las nuevas tensiones financieras y a la desaceleración más pronunciada de lo esperado en las principales economías.
La economía global no pasa por un buen momento ante el aumento de las tensiones arancelarias entre China y Estados Unidos, un escenario que sigue aumentando el clima de incertidumbre comercial, que dificulta un crecimiento económico mundial y reduce las inversiones extranjeras.
Este frenazo económico se viene advirtiendo desde mayo cuando la Organización Mundial del Comercio redujo su proyección de crecimiento global de 3 % a 2,6 % y cuando la OCDE disminuyó su pronóstico de 3,3 % a 3,2 %.
A estas proyecciones negativas ahora se suma la del Banco Mundial que, en su más reciente informe publicado, redujo la variación del PIB mundial en 0,3 puntos porcentuales para 2019 (pasando de 2,9 % a 2,6 %) y 0,1 puntos porcentuales para 2020 (de 2,8 % a 2,7 %).
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