Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Propiedad, planta y equipo, ¿cómo debe ser su manejo luego del ESFA?


Propiedad, planta y equipo, ¿cómo debe ser su manejo luego del ESFA?
Actualizado: 25 noviembre, 2015 (hace 8 años)

Con variables como el costo atribuido, la vida útil, el valor residual y la provisión de desmantelamiento se procede a amortizar la propiedad, planta y equipo a lo largo de la vida útil establecida.

Brevemente respondamos la siguiente inquietud: ¿cuál es el manejo de las propiedades, planta y equipo después del ESFA?

Con la propiedad, planta y equipo en el momento del balance de apertura se determina si se van a medir al valor razonable, por el valor en libros revaluado, o si se iba a medir según todos los requerimientos de la Sección 17 de NIIF para pymes.

Si se va aplicar NIIF Plenas se tienen las mismas opciones anteriores, con la diferencia que no es la Sección 17 sino la NIC 16 cuando se trata de NIIF Plenas.

Al momento de elaboración del ESFA, la entidad debió establecer el valor por el cual se reconoce la propiedad, planta y equipo y plasmarlo en el estado financiero; para el tratamiento que se dará en adelante, también debió quedar claro desde el inicio la estimación de vida útil, un valor residual si lo tuviera, así como también un costo por desmantelamiento en los casos que corresponda.

“Tenga en cuenta que al 31 de diciembre de cada año se debe hacer un análisis del deterioro del valor de la propiedad, planta y equipo.”

Con las anteriores variables –el costo atribuido, la vida útil, el valor residual, la provisión de desmantelamiento– se procede a amortizar la propiedad, planta y equipo a lo largo de la vida útil establecida.

Tenga en cuenta que al 31 de diciembre de cada año se debe hacer un análisis del deterioro del valor de la propiedad, planta y equipo. Esta no solo se deteriora en su parte física, sino que este deterioro tiene que ver con la capacidad que se tiene para generar beneficios.

Por ejemplo, se puede contar con una máquina que está bien cuidada, bonita, pintada, pero ya no se utiliza porque el producto ya no sale al mercado. Aunque la máquina esté bien presentable, su valor está deteriorado. No tiene que ver con cuánto costó sino con cuánto provecho se le puede sacar.

Cada año entonces se hará la evaluación de deterioro del valor sobre la propiedad, planta y equipo. Se depreciará según la vida útil que haya determinado y periódicamente hay que preguntarse si la vida útil se modificó –se alargó o acortó– y de esta forma tendrá efecto de ahí en adelante, no lo que pasó atrás.

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