Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Proyecto F: estrategia de Asobancaria para reducir el uso de efectivo y aumentar pagos electrónicos


Proyecto F: estrategia de Asobancaria para reducir el uso de efectivo y aumentar pagos electrónicos
Actualizado: 14 diciembre, 2017 (hace 6 años)

El 11 de diciembre, la Asobancaria presentó el Proyecto F, una estrategia para que se reduzca el uso del efectivo y los colombianos se conecten más con el uso de los medios y servicios electrónicos ofrecidos por la banca. Explicamos en qué consiste este método que busca su despertar en 2018.

En el más reciente Plan Nacional de Desarrollo el Gobierno estableció tres metas para el próximo año: que el 84 % de su población cuente con al menos un producto financiero, aumentar el número de personas adultas con al menos una cuenta de ahorros activa de 52,9 % a 65 % y reducir el indicador de uso del efectivo hacia niveles de 8,5 %.

Por la complejidad de alcanzar las anteriores metas, Asobancaria, junto a sus entidades agremiadas, y de la mano del Departamento Nacional de Planeación y el Ministerio de Hacienda, diseñaron y comenzaron a implementar el Proyecto F.

Diagnóstico sobre el uso del efectivo en Colombia

Durante la primera etapa del proyecto se realizó un diagnóstico para entender el uso del efectivo en Colombia. Asobancaria realizó un estudio donde tocó tres puntos: el impacto del uso del efectivo en la industria bancaria, el grado de penetración de los medios de pago electrónico en la economía y el impacto sobre el recaudo tributario y el PIB.

“la Unidad de Información y Análisis Financiero –UIAF–, se sumó para averiguar sobre la relación que existe entre el manejo del efectivo y la criminalidad, el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo”

Paso seguido, entidades como Redeban, Banco de la República y Cifras y Conceptos iniciaron un proceso de análisis e identificación para detectar por qué los consumidores, comercios y sector real han mantenido y prefieren el efectivo frente a las alternativas de pagos electrónicos. En este punto, la Unidad de Información y Análisis Financiero –UIAF–, se sumó para averiguar sobre la relación que existe entre el manejo del efectivo y la criminalidad, el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.

Las tres estrategias del Proyecto F

Con el diagnóstico alrededor de los puntos anteriormente nombrados se estructuró el Proyecto F en tres estrategias:

  • Recaudos públicos.
  • Pagos electrónicos.
  • Interoperabilidad de productos y canales.

En la estrategia de recaudos públicos se definió un modelo para los peajes que busca que los usuarios tengan la opción de pagar de forma electrónica. De igual manera, se observa la necesidad de que tanto empresas como personas puedan realizar el pago de sus impuestos sin usar el efectivo.

Sobre este último punto, Asobancaria y Dian están observando los inconvenientes asociados al pago electrónico de impuestos aduaneros. Mediante la expedición del nuevo estatuto aduanero se busca obligar a los contribuyentes a que liquiden y paguen estas obligaciones de forma electrónica, lo que permitirá optimizar el proceso de pagos para este sector de la economía.

Frente a lo que tiene que ver con el uso de medios electrónicos para pagos, la idea es que tenga un alcance para todos los agentes que realizan transacciones, empezando por el Estado. Por ejemplo, Asobancaria está explorando la posibilidad de que los pagos a proveedores y de nómina se hagan a través de productos financieros. Desde el 2013 el MinTIC, por medio del programa INNpulsa Mipyme, ha cofinanciado proyectos y, en el marco del mismo plan, entregado herramientas tecnológicas a pequeños comercios a través de una empresa ancla o proveedor para permitirles el acceso a internet y, en algunos casos, la aceptación de medios de pago electrónicos.

Finalmente, el punto de la interoperabilidad de productos y canales es una condición para establecer un ecosistema de pagos donde múltiples actores heterogéneos puedan comunicarse de una manera fluida y eficiente.

Con el crecimiento de cuentas de ahorro de trámite simplificado y de los depósitos electrónicos a cargo de diferentes bancos, la interoperabilidad de estos productos es fundamental para que los consumidores realicen transferencias entre productos como Daviplata, transfer Aval y Ahorro a la Mano, lo que incentivaría la tenencia y uso de estos productos, pensados para transacciones diarias, numerosas y de bajo valor. Asobancaria también busca que se usen mucho más los corresponsales bancarios, los cuales tienen un bajo nivel de actividad, ya que en su mayoría son utilizados para realizar transacciones y recaudo.

Material relacionado

Descubre más recursos registrándote o logueándote. Iniciar sesión Registro gratuito
,