Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Aunque el proceso de convergencia a Estándares Internacionales ya está puesto en marcha, durante su ejecución –como es normal– se han seguido creando empresas; las que clasifiquen como pymes y se hayan constituido durante el 2015 no están exentas del cronograma.
Muchas de las entidades que se constituyeron a lo largo del 2015 –período de transición para las pymes– se encuentran en la disyuntiva de saber cómo aplicar el cronograma, qué informes les corresponde elaborar y cuándo deberán hacer su primer estado financiero comparativo bajo Estándares Internacionales de Información Financiera; en este editorial se aclaran todas las dudas al respecto.
Ahora bien, en primera instancia la entidad debe tener claridad de la versión del marco normativo que le corresponde, pues aunque los marcos normativos tuvieron su última modificación en diciembre del 2015 cuando se expidió el Decreto Único Reglamentario 2420 del 2015 –compilatorio de las normas de Aseguramiento de la Información y las de Información Financiera–, que posteriormente fue modificado por el Decreto 2496 del 2015, esta debe preparar sus estados financieros según el Estándar Internacional vigente en dicho momento, es decir, el Decreto 3022 del 2012.
El artículo 3 del Decreto 3022 contiene lo que es el cronograma para la convergencia al Estándar Internacional para Pymes; en este se determina que las entidades del Grupo 2 presentarán sus primeros estados financieros según Estándares Internacionales, con corte al 31 de diciembre del 2016. Lo anterior quiere decir que aunque la organización en particular se haya creado durante el 2015, sus primeros estados financieros preparados según el Estándar Internacional son los que se elaborarán en diciembre del 2016.
Suponiendo que la entidad fue creada en octubre del 2015, el período comprendido entre octubre y diciembre del 2015 –primeros tres primeros meses hasta el corte de diciembre–, tendrá que preparar información bajo normas locales y esa será la que tendrá validez para efectos legales, pues así lo ha dispuesto el cronograma de convergencia para este año de transición.
Sin embargo, la entidad también debió elaborar por esos tres primeros meses, de forma paralela, su información financiera alterna según las indicaciones del Estándar Internacional para Pymes del Decreto 3022. En este sentido la entidad tendrá el siguiente panorama:
Será su primer informe financiero preparado en octubre del 2015 cuando se creó la entidad; en ese momento la empresa tuvo que elaborar su primer balance bajo la norma local para efectos legales de constitución, y uno bajo el Estándar Internacional para Pymes que constituirá su Estado de Situación Financiera de Apertura –ESFA–; este último será un documento interno que no tendrá que reportase ante ninguna entidad, a menos que le sea requerido.
La nueva empresa tendrá al corte del 2015 dos juegos de informes financieros –el local y el Estándar Internacional–. Los que deberán remitirse a las entidades de control y vigilancia solo serán los preparados según la norma local; los demás se siguen conservando para información interna.
Para el corte del 2016 la entidad habrá atravesado su primer período de implementación plena del Estándar Internacional y por tanto presentará sus primeros estados financieros comparativos, en los cuales contrastará las cifras del corte 2015 con las del 2016; además se anexará el balance de apertura que elaboró en octubre y no tendrá ajustes por conversión, puesto que al ser creada durante el 2015 la organización aplicó el Estándar Internacional desde el inicio y no hizo conversión de un estado financiero local.
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