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¿Qué hacer para que seis millones de adultos colombianos ingresen al sistema financiero?


¿Qué hacer para que seis millones de adultos colombianos ingresen al sistema financiero?
Actualizado: 21 febrero, 2019 (hace 5 años)

Desde el punto de vista de la Asobancaria, los niveles de inclusión financiera se deben fomentar en la población rural colombiana. Mientras el 87 % de los adultos de las zonas urbanas cuenta con un producto financiero, esta cifra es del 65 % en las áreas rurales. ¿A qué se debe este rezago?

La inclusión financiera en Colombia durante los últimos diez años presenta un mayor porcentaje de adultos con al menos un producto financiero, pasando de un 55 % en 2008 a 81,3 % en 2018. En consecuencia, el número de adultos con algún producto pasó de 18,8 millones a 27,8 millones en este tiempo. Sin embargo, todavía cerca de seis millones de adultos continúan sin tener acceso al sistema financiero formal.

“Mientras el 87 % de los adultos en las zonas urbanas cuenta con un producto financiero, esta cifra es del 65 % en las áreas rurales, y del 54,7 % en sectores denominados como rurales dispersos”

La Asobancaria, en la edición 1172 de su informe Semana Económica 2019, afirma que gran parte del trabajo que queda por hacer en materia del acceso de todos los colombianos al sistema financiero se encuentra relacionado con fomentar los niveles de inclusión financiera entre la población rural. Según información de la Banca de las Oportunidades, se presenta una brecha significativa en materia del acceso a los productos financieros. Mientras el 87 % de los adultos en las zonas urbanas cuenta con un producto financiero, esta cifra es del 65 % en las áreas rurales, y del 54,7 % en sectores denominados como rurales dispersos.

«Esta condición lleva a que el diseño de las políticas públicas encaminadas a promover un mayor acceso de los colombianos a los productos y servicios financieros deba estar enfocado principalmente en aquellas personas que habitan estas zonas del territorio nacional», manifiesta Asobancaria.

Para lograr lo anterior, se debe incrementar el nivel de información sobre la oferta y la demanda de los productos financieros para este segmento de la población. La entidad ha venido trabajando en cooperación con otras entidades para generar más información sobre la demanda de productos financieros en áreas rurales.

Desde la Asobancaria se afirma que el crédito para actividades agropecuarias en los últimos cinco años tiene un desempeño favorable, lo que se evidencia en que la tasa de crecimiento de la cartera de este segmento (cercana al 7 % real) ha mostrado un incremento mayor al registrado por la cartera total del sistema financiero (5 % real).

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De esta manera, la cartera agropecuaria alcanzó un registro de $21,9 billones, y se concentró principalmente en los departamentos de Antioquia y Valle del Cauca. En el mismo sentido, el monto de los desembolsos efectuados en el sector ha crecido a niveles cercanos al 18 % anual durante el mismo período, lo que favorece el incremento de la profundización financiera del sector.

Sin embargo, se presentan rezagos en materia de la profundización e inclusión financiera de los agentes económicos que componen el sector rural. De hecho, el indicador de profundización del sector rural (35 %) se encuentra más de 13 puntos porcentuales –p.p.– por debajo del nivel observado para el total de la economía (48,8 %). «De igual forma, existe un rezago en los niveles de inclusión financiera rural comparado con los niveles de acceso observados en las áreas de mayor desarrollo urbano, brecha que en las zonas rurales asciende a un valor cercano a los 20 p.p., mientras que para el caso del segmento rural disperso resulta aún mayor, llegando a 30 p.p.», indica el informe.

Los empresarios del sector agropecuario prefieren acceder a créditos formales de bajo monto; destinan sus recursos para subsanar dificultades en el comportamiento del ciclo de su actividad productiva y restricciones en su flujo de caja. La mayor parte de ellos cumple con sus obligaciones financieras, mientras que quienes las incumplen argumentan que tiene que ver con el ciclo productivo o bajos niveles de rentabilidad.

Entre los empresarios que no acceden al crédito formal, la mayoría dice que no lo hace por el exceso de trámites, y por falta de interés; situación que alerta sobre la necesidad de continuar fortaleciendo las estrategias que se vienen abordando al momento de financiar el sector rural.

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