Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Relevo generacional en la Contaduría Profesional Colombiana: hacia una verdadera Contaduría Pública – Hernán Rodriguez


Autor: Hérnan A. Rodríguez

Se acabó la época del manejo gremial orientativo y doctrinal de la Contaduría Pública colombiana por consignas y clichés. Se acabó la época del adoctrinamiento basado en el repudio a lo internacional; o más aun basado en el repudio a las tesis centrales del capitalismo.

No le fue bien a la profesión contable siguiendo directrices de confrontación con el régimen que busca el bienestar común con tesis de capitalismo de estado. No le fue bien a la profesión contable cuando sus dirigentes no pudieron generar la empatía para ser tenidos en cuentas por la política de confianza inversionista. No le fue bien tratando de seguir regulaciones producto de epifanías individuales, o de mesianismo banal.

Se acabó la época en que se privilegiaba preparación de información para los trámites empresariales y el control de los negocios, como la competencia básica del Contador Profesional. Se acabó la época del Revisor Fiscal que “agrega valor”. Se acabó la época de la “firma de balance” y de “llevar contabilidades”

No le fue bien a la profesión cuando los líderes exigían con arrogancia de pioneros pensadores, una remuneración por importancia de las tareas contratadas en vez de mirar la hacia las competencias profesional relacionadas con el aseguramiento de información financiera.

Empieza una época de emisión de juicios profesionales en la preparación y aseguramiento de estados financieros de propósito general. Época esta donde el contador tiene oportunidades de alcance global; y sobre todo una gran responsabilidad por redefinir el alcance de la protección a lo nacional.

Empieza una época donde mirar hacia afuera no es entreguismo, ni es anti nacionalismo y mucho menos pecado. Época esta, donde todos los contadores colombianos deberíamos ser partícipes, con pensamiento crítico, del futuro de nuestra profesión.

Que se nos pide maestría en lo disciplinar, ¡la diseñaremos y la cursaremos! Que se nos pide elevar la competencia, ¡la elevaremos! Que se nos pide conducta profesional y ética. ¡Lo conseguiremos! Que se nos pide esfuerzos convergentes hacia normas únicas, ¡Aquí estamos!

Ya pasó la época del caudillismo y llego la época gremial con responsabilidad social. El relevo no es por edad sino por actitud hacia el cambio y la formación continua. Un sí a la innovación educativa en los programas de Contaduría, con verdadera investigación contable. ¡No a la cátedra sostenedora de caudillismo! ¡Bienvenido el enfoque racionalista en la Contaduría Colombiana!

¿Y del CTCP que? ¿Dónde están las convergencias anticipadas? ¿Dónde están las producciones lógico-deductivas? ¿Tenemos 2649s? ¿Tenemos normalizadores, reguladores, supervisores, gremios y academia?

«La capacidad, la competencia y la conducta al trabajar sobre información financiera global» (yo)

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