Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.

Renuncia justificada o despido indirecto abordada en 4 respuestas clave


Actualizado: 1 agosto, 2016 (hace 8 años)

La renuncia justificada, también conocida como despido indirecto, se presenta cuando el trabajador decide finalizar el vínculo contractual por los actos o el incumplimiento de obligaciones o deberes de su empleador. A continuación presentamos 4 respuestas clave en las cuales se explica esta situación.

El artículo 62 del Código Sustantivo del Trabajo señala en su literal b) las justas causas para dar por finalizado el contrato individual de trabajo por parte del trabajador, es decir, señala bajo qué circunstancias el trabajador puede renunciar como consecuencia de hechos distintos a su voluntad ocasionados por el actuar de su empleador. Cuando ocurre, el trabajador puede solicitar a su empleador el pago de la indemnización por despido injustificado. Cabe aclarar que si bien dicho acto técnicamente es una renuncia y no un despido, esta es concebida como un despido indirecto y, por lo tanto, el empleador debe asumir su responsabilidad por haber realizado un despido sin justa causa.

Ahora bien, para conocer las causales de renuncia justificada o despido con causa imputable al empleador, es necesario remitirse al artículo 62, literal b) y al artículo 57 sobre las obligaciones especiales del empleador.

Lo anterior significa que cuando el empleador incumpla sus obligaciones o se presente alguna de las circunstancias señaladas por los artículos anteriormente citados, el trabajador puede renunciar y solicitarle a este el monto de la indemnización causada por su incumplimiento. Ahora bien, si el empleador se niega a efectuar el pago, el trabajador puede dirigirse a instancias judiciales o acudir al Inspector de Trabajo para salvaguardar sus derechos.

A continuación presentamos 4 preguntas resueltas por nuestros consultores en materia laboral sobre la renuncia justificada, también llamada despido indirecto, las cuales le serán de utilidad ante situaciones en las que se pueda presentar alguna de estas:

Definición de despido indirecto o renuncia con justa causa

¿Qué es una renuncia con justa causa? ¿En qué casos es procedente? ¿Se necesita abogado para este proceso?

La renuncia por justa causa, también llamada despido indirecto, hace referencia a aquellas situaciones en que el empleador falla en algunas de sus obligaciones legales contractuales, reglamentarias o convencionales que dan lugar a la renuncia del trabajador con justa causa.

Ahora bien, para renunciar con justa causa no es necesario que el trabajador cuente con un abogado, toda vez que esta se puede presentar directamente por el trabajador a su empleador.

Por el contrario, cuando se trate de la reclamación ante un juez laboral, sí es necesario que el trabajador cuente con abogado; no obstante, esta también puede ser iniciada ante el Inspector de Trabajo, trámite para el cual no se requiere de este.

Procedimiento para solicitar indemnización por despido indirecto

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¿Cuál es el procedimiento para reclamar al empleador una indemnización por renuncia por justa causa?

Para responder esta pregunta es necesario recordar que todo contrato individual de trabajo cuenta con una condición resolutoria, la cual consiste en que ante el incumplimiento de alguna de las partes en sus obligaciones se da lugar a que la parte afectada dé por terminado el vínculo contractual.

Ahora bien, cuando se trata del incumplimiento del empleador, nace para el trabajador el derecho de dar por finalizado el contrato con justa causa, y por ende le nace a este el derecho de cobrar el monto de la indemnización.

Para que haya lugar a una indemnización por despido indirecto es necesario que el trabajador, en el momento de la renuncia, notifique al empleador que su voluntad de dar por finalizado el contrato nace en virtud al incumplimiento de las obligaciones y deberes de este como empleador y no a la mera voluntad del trabajador. Dicha notificación no puede ser presentada posterior a la renuncia, o de lo contrario se entenderá que el trabajador renunció por una causal netamente de su voluntad.

Ejemplo de causales de despido indirecto

A continuación presentamos 2 preguntas resueltas por nuestros consultores en las cuales podrá encontrar ejemplarizado el despido indirecto:

¿La imposición de tareas ajenas a las pactadas en el contrato de trabajo se considera causal de despido indirecto imputable al empleador?

Sí. Por ningún motivo el empleador puede imponerle al trabajador realizar tareas distintas a las pactadas contractualmente; de ocurrir, el trabajador podría renunciar con justa causa y solicitar el monto de la indemnización.

Ahora bien, es importante aclarar que cuando a petición del empleador el trabajador realiza de forma no habitual actividades ajenas, dicha conducta no se tomará como un cambio de funciones, siempre y cuando no sea permanente y cuente con el debido consentimiento del trabajador.

Si el contrato inicial de trabajo tenía unas funciones establecidas y la empresa realiza cambios organizacionales imprevistos, los cuales tienen como consecuencia la alteración de las funciones del trabajador, ¿se debe realizar cambio de contrato? En caso de no aceptar las nuevas funciones, ¿es causal legal de despido?

Lo primero que se debe señalar es que el empleador tiene derecho a hacer ciertos cambios contractuales sin que para esto se requiera autorización del trabajador, siempre y cuando los cambios no afecten sustancialmente a este último. Ahora bien, cuando dichos cambios afectan la vida privada del trabajador, el empleador sí necesita autorización del trabajador; cuando esto ocurre el trabajador puede renunciar con justa causa imputable al trabajador.

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