Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Generalmente, las sanciones que se generan en el sistema de seguridad social obedecen a la mora en la que incurre el empleador o el aportante al momento del pago de los aportes. En lo que respecta a las sanciones que recaigan sobre el afiliado, beneficiario o cotizante para la no prestación del servicio no se usan multas, sino suspensiones del servicio por mora.
Anteriormente se establecían multas al usuario cuando este faltaba a las citas médicas sin comunicarse previamente para informar la inasistencia. No obstante, esto quedó derogado mediante el artículo 55 de la Ley 1438 de 2011, en el cual se establece la prohibición de cobro de cualquier tipo de multa a los cotizantes y/o beneficiarios. Sin embargo, existe una sanción pedagógica para quienes incurran en estas conductas.
La sanción pedagógica consiste en una capacitación, aproximadamente de dos horas, en las cuales se le comunica al cotizante o beneficiario la importancia de la asistencia a las citas médicas.
Otra situación que podría tenerse como sanción es la suspensión del servicio por mora en los pagos, establecida en el artículo 2.1.3.15 del Decreto 780 de 2016. Dicha sanción consiste, como su nombre lo indica, en la no asignación de citas médicas, entrega de medicamentos, continuidad en tratamientos, entre otros. La importancia de estar al día en el pago de los aportes radica en que si, por ejemplo, el cotizante o beneficiario se encuentra en un tratamiento, este no le sea suspendido y pueda tener una rehabilitación oportuna.
Sin embargo, la suspensión de los servicios depende del tiempo transcurrido en mora, ya que en el primer mes el cotizante puede seguir siendo atendido por urgencias, aunque este servicio será suspendido posteriormente si el cotizante persiste en incumplir el pago de sus aportes.
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