Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
* Foto: larepublica.co
La convergencia a las Normas Internacionales de Contabilidad del Sector Público –NICSP– es una realidad hoy a nivel mundial por una necesidad de globalización de las economías que exigen a las diferentes entidades, no solamente a las colombianas, para fortalecer sus prácticas contables y financieras bajo marcos de referencia internacionales y en la búsqueda de mejores ejecuciones.“La convergencia a las Normas Internacionales de Contabilidad del Sector Público –NICSP– es una realidad hoy a nivel mundial”Tweet ThisAlexandra Peñuela, directora técnica del Instituto Nacional de Contadores Públicos indica que, aunque el proceso de convergencia hacia las Normas Internacionales de Contabilidad del Sector Público en el país ha estado demorado, existe una gran oportunidad para lograr procesos transparentes.
Alexandra Peñuela, directora técnica del Instituto Nacional de Contadores Públicos –INCP–, asegura que el objetivo principal de estas normas es la consecución de la transparencia en las finanzas públicas.
“Los ciudadanos somos afectados por las decisiones financieras que el Gobierno adopta, y entre más fuertes y transparentes sean sus prácticas contables y financieras hará que potencialmente las administraciones tomen determinaciones mucho más acordes a la realidad económica del país”, dice Peñuela.
«El fracaso de no poder manejar adecuadamente las finanzas seguirá teniendo implicaciones democráticas, malestar social, no cumplimiento de compromisos financieros internacionales, baja de la credibilidad del Gobierno ante los ciudadanos, organismos multilaterales y países que ayudan en tiempos de crisis económica», argumenta.
Por otra parte, la Contaduría General de la Nación ha realizado esfuerzos para que esto sea realidad y por ello ha estado en la tarea de emitir marcos de referencia a las empresas y entidades del Estado, según la función económica de cada una de estas, con el fin de cumplir adecuadamente su función de normalización y regulación contables.
La vocera del INCP recalca que los esfuerzos de la Contaduría General no han sido improvisados, y desde el 2009 emprendió el proyecto de “Estudio, actualización y armonización de la Contaduría Pública con estándares internacionales de contabilidad”.
«Por otra parte, se han realizado comparaciones entre estándares internacionales, principios y normas colombianas para así hacer caracterizaciones del sector público colombiano», explica Peñuela.
Este proyecto no lo ha llevado a cabo sola sino que por el contrario ha contado, a lo largo de su desarrollo, con el apoyo técnico del Banco Mundial; igualmente ha participado en los comités técnicos de discusión establecidos por el Consejo Técnico de la Contaduría Pública, y en reuniones con Superintendencias y demás organismos. Con base en este trabajo ha expedido sus marcos de referencia.
Peñuela analiza que para que el Gobierno tenga una tarea exitosa debe contar con la ayuda de los preparadores de la información contable y financiera en el sector público. “El reto para los preparadores de la información financiera es gigante ya que serán los que interpretarán, aplicarán y usarán su juicio profesional de lo que el Gobierno plasma como normatividad”.
Por último, la directora técnica del INCP advierte que “en los retos que se presentan hay una gran oportunidad en la convergencia. Se trata de ordenar la contabilidad, y tomar decisiones radicales de partidas que no son útiles a la información contable y financiera».
Según Peñuela, la depuración es clave para este propósito y es algo que se debió realizar hace bastante tiempo. Este proceso comenzó en el 2009 y los contadores y la administración sabían que tarde o temprano tenía que ser realidad para su entidad. «Si ya no se hizo a tiempo, es algo que se debe asumir, pero no postergar más», concluye.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
