Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
En NIIF no existen causales de disolución. Dentro del contexto de la normatividad nacional una causal de disolución es un requerimiento de carácter legal que pide el Código de Comercio cuando el patrimonio disminuye de manera significativa y en más de un 50% del que tenía en períodos anteriores.
¿Dicha reducción qué significa? La ley colombiana advierte que esa entidad debe hacer un alto en el camino y evaluar si cierra o si por el contrario se reestructura, o si necesita conseguir un nuevo accionista o que los actuales socios inyecten capital.
Con este contexto, si una entidad va a implementar NIIF y el resultado de las NIIF es alguno de los anteriores, es una advertencia de que no está bien financieramente y posee problemas. No debería en ningún momento suprimirse esa norma legal establecida en el Código de Comercio ya que es una medida preventiva para que las empresas reaccionen ante este evento.
Si las empresas no pueden distribuir utilidades pues no lo hagan, si deben conseguir nuevos inversionistas háganlo. Lo que se busca es proteger a los acreedores de esa entidad porque si la empresa sigue así puede quedar en causal de no volver a pagar y eso es lo grave.
Es una buena medida preventiva así sea de carácter legal. Obviamente las NIIF no se entrometen en este punto porque, por ser un estándar internacional, respetan que cada país plantee alternativas para el manejo de ciertos requerimientos legales.
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