Para la Corte Constitucional es inaceptable que se considere lesionado el derecho al mínimo vital de personas que obtienen sumas millonarias, cuando muchos colombianos no aspiran a obtener ni una ínfima parte de semejantes montos de dinero mensual.
Las centrales obreras, Anif y el Banco de la República ya empiezan a hablar del mínimo. Y aunque las diversas partes tiran para su lado, lo
más probable es que sea fijado por decreto. La realidad es que Colombia es un país con inequidad salarial.