Las incorrecciones en los estados financieros pueden estar causadas por error o por fraude. Las últimas, pueden encontrar su origen bien sea por omisión de información fraudulenta, o por apropiación indebida de activos, sobre la cual explicaremos los factores de riesgo de fraude.
En el ejercicio de sus labores, el auditor debe analizar la razonabilidad de los Estados Financieros considerados en conjunto, verificando que están libres de inexactitudes relevantes a causa de prácticas fraudulentas o errores. Sin embargo, debido a las limitaciones inherentes a la auditoría, existe el riesgo de no identificar inexactitudes relevantes en la información de los Estados Financieros, aun cuando la auditoría se haya planeado y ejecutado adecuadamente.