El proceso de cierre que se aproxima implica que los encargados de preparar la información financiera y fiscal depuren las diferencias que hayan surgido en la aplicación de las bases contables y tributarias. Lo anterior dado que hay mediciones y procesos que difieren en ambos marcos.
El cierre contable como proceso operativo sigue siendo en esencia el mismo, dado que la aplicación de los nuevos marcos normativos no plantea directrices especiales en relación con la realización de este proceso.