Complejidad en la regulación y numerosos trámites son factores asociados con corrupción, en la medida que los ciudadanos optan por acudir a pagos informales para acelerar los trámites gubernamentales.
Para 2030, el 20 % de las personas que hoy trabajan tendrán que cambiar de ocupación y adquirir nuevas competencias que les permitan seguir insertados en el mercado laboral. Todo un reto para las políticas laborales y los sistemas de protección social.
Colombia cuenta con cifras muy alarmantes sobre ausentismo y estabilidad laboral reforzada, las cuales, junto con la baja pertinencia y calidad de la formación del capital humano, constituyen las causas de la baja productividad laboral en el país.
Se deben flexibilizar y ajustar las normas que rigen el mercado laboral, para que puedan hacerle frente a los retos de la nueva economía. Así mismo, una tarea que conduzca a garantizar que los incrementos del salario mínimo no superen la suma de la inflación y la productividad.
Un país que busca avanzar en equidad no puede permitirse que solo uno de cada cuatro adultos mayores reciba una pensión contributiva, ni tampoco que sean típicamente los trabajadores de mayores ingresos quienes logran obtener este beneficio.