Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
La aplicación de marcos contables normativos basados en estándares internacionales requiere una adecuada interpretación de los requerimientos que estos establecen. En este editorial se presentan algunos puntos clave para el entendimiento de estos estándares.
En varias ocasiones nos hemos enfrentado a situaciones en que resulta necesario aplicar un requerimiento proveniente de las normas contables a una situación particular, y en algunas ocasiones es complejo aplicar el tratamiento preciso.
El primer elemento que debe tenerse en cuenta al aplicar los estándares internacionales, es el marco conceptual, pues sobre él están diseñadas las demás normas (o secciones) sobre la materia. En condiciones normales, ningún requerimiento de los estándares internacionales contradice los fundamentos del marco conceptual, salvo en situaciones muy específicas.
El Marco Conceptual de los estándares internacionales (o Sección 2 de la Norma para Pymes) establece los principios básicos que deben tenerse en cuenta en la preparación y presentación de estados financieros. Este documento es la piedra angular de los estándares internacionales, y sus elementos se encuentran presentes en todos los demás requerimientos normativos.
El entendimiento del Marco Conceptual permite conocer la forma como el emisor de las Normas (IASB) comprende e interpreta los hechos económicos, y desarrolla estándares para su reconocimiento, medición, clasificación, presentación y revelación.
Una vez se ha comprendido el Marco Conceptual, es importante saber interpretar los requerimientos del conjunto de Normas Internacionales. Para un mejor entendimiento, tenga en cuenta que existen requerimientos expresos (obligatorios), requerimientos alternativos (opcionales) y prohibiciones.
Estos son de obligatoria observancia, y no pueden ser reemplazados por tratamientos alternativos más sencillos, o por instrucciones de otras fuentes normativas, sino que tienen que ser aplicados tal y como lo establece el estándar Internacional.
Se identifican porque tienen verbos en forma imperativa, es decir, dan órdenes sobre el tratamiento de una transacción en particular o la forma como la entidad de manejar algún aspecto de sus estados financieros.
Un ejemplo de un requerimiento expreso se encuentra en el párrafo 3.3 de la Norma para Pymes:
“Una entidad cuyos estados financieros cumplan la NIIF para las PYMES efectuará en las notas una declaración, explícita y sin reservas de dicho cumplimiento. Los estados financieros no deberán señalar que cumplen la NIIF para las PYMES a menos que cumplan con todos los requerimientos de esta NIIF.”
(El subrayado es nuestro)
Como se puede observar, la palabra efectuará se encuentra en forma imperativa, es decir, no permite que la entidad tome una decisión, sino que le ordena realizar dicha declaración.
Otro ejemplo de requerimiento expreso se encuentra en el párrafo 3.10 de la misma Norma:
“Una entidad presentará un juego completo de estados financieros (incluyendo información comparativa―véase el párrafo 3.14) al menos anualmente.”
(El subrayado es nuestro)
De nuevo aparece el verbo en imperativo, en este caso, Presentará indica un requerimiento de obligatorio cumplimiento.
En algunas ocasiones, los estándares internacionales plantean tratamientos alternativos para determinadas transacciones.
Estos requerimientos se identifican por el uso de palabras clave, tales como: podrá, aplicará uno de los siguientes, elegirá entre; establecerá un tratamiento para, entre otros.
En estos casos, la entidad elegirá el tratamiento que permita una presentación más razonable y fiable del hecho económico, la transacción u otro evento.
Un ejemplo de lo anterior está en el párrafo 3.25 de la Norma para Pymes:
“Esta NIIF no trata la presentación de la información por segmentos, las ganancias por acción o la información financiera intermedia de una pequeña o mediana entidad. Una entidad que decida revelar esta información describirá los criterios para su preparación y presentación.”
(El subrayado es nuestro)
La palabra subrayada (decida) permite concluir que una entidad puede presentar este tipo de información no requerida en el Estándar Internacional para Pymes, y además puede usar sus propios criterios de presentación para ella.
Las prohibiciones son tratamientos que están impedidos de manera expresa por la Norma, de tal manera que ninguna entidad puede utilizarlos, a menos que sea para transacciones no materiales.
Un ejemplo de lo anterior se encuentra en el párrafo 5.4.a):
Los efectos de correcciones de errores y cambios en las políticas contables se presentan como ajustes retroactivos de períodos anteriores y no como parte del resultado en el período en el que surgen (véase Sección 10).
Esta prohibición establece que la entidad no debe ajustar los resultados del ejercicio por efecto de la corrección de un error o el cambio de una política contable.
CP. Juan David Maya Herrera
Consultor de Estándares Internacionales de Información Financiera
Certificación Internacional por el ICAEW en IFRS Full (NIIF Plenas)
*Exclusivo para actualícese.com
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
