Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Actualmente, a la reforma tributaria solo le resta la sanción presidencial, ¿por qué está detenido el proceso?
La tributaria tiene por objeto un recaudo del 25 % de los ingresos del presupuesto de inversión del Gobierno nacional.
No te pierdas ningún detalle a continuación.
El miércoles 16 de noviembre el texto conciliado de la reforma tributaria 2022 fue aprobado en la plenaria del Senado, donde obtuvo 61 votos a favor y 20 en contra y; al día siguiente, el 17 de noviembre de 2022, fue aprobado en plenaria de la Cámara de Representantes al recibir 122 votos a favor y 27 en contra.
El siguiente paso, debía ser la sanción presidencial; sin embargo, pasan los días y no hay noticias al respecto.
De acuerdo con lo estipulado el artículo 166 de la Constitución Política de Colombia, el Gobierno cuenta con un término de seis días para devolver con objeciones cualquier proyecto cuando no conste de más de veinte artículos; de diez días cuando el proyecto contenga de veintiuno a cincuenta artículos; y hasta de veinte días cuando los artículos sean más de cincuenta.
Es preciso recordar que la reforma tributaria tiene 96 artículos, por lo que el presidente Petro solo tiene 20 días para objetar la reforma.
Sin embargo, ocurren dos situaciones que es importante no perder de vista:
Así, aunque se entiende que si transcurridos los indicados términos sin la objeción presidencial el Gobierno debe proceder a la sanción de la ley, la cuestión es que el límite que impone la Constitución no es al término para sancionar, sino solo para objetar. Es decir, una vez pasados los 20 días sabremos con toda seguridad (aunque no será novedad) que el texto conciliado será definitivamente ley de la república, pero no sabemos cuándo la norma será sancionada.
Por qué si bien ya sabemos que los cambios en impuestos como el de renta, saludables, carbono y otros son inminentes para el año gravable 2023, la reforma tributaria también contempla modificaciones en el régimen de procedimiento tributario que empezarían a aplicar inmediatamente la reforma sea ley de la república y que representan un alivio para muchos contribuyentes.
Entre dichos aspectos figuran, por ejemplo, la reducción de sanciones en información exógena, la reducción transitoria de la sanción de extemporaneidad y de los intereses de mora por deudas ante la Dian, entre otros.
La reforma tributaria espera poder recaudar el 25 % de los ingresos del presupuesto de inversión del Gobierno nacional.
Con esta inyección económica, el gobierno Petro espera poder financiar todas sus propuestas realizadas en campaña presidencial, tales como fortalecer el sistema educativo y de salud, erradicar el hambre y disminuir la pobreza.
Cabe resaltar que la mayoría de los ingresos que espera recaudar la reforma tributaria provienen de las empresas. . Según se ha indicado, el sector de hidrocarburos y las personas más ricas tendrán el mayor peso tributario.
De acuerdo con un informe de la Comisión de Expertos en Beneficios Tributarios, el 25 % del recaudo tributario depende de las empresas y tan solo el 6 % de las empresas.
Por lo tanto, se puede decir que la reforma tributaria del presidente Petro depende en gran medida de las empresas y poco de las personas naturales. Lo anterior ha generado una serie de opiniones de expertos y políticos que manifiestan que la tributaria va en contra del empleo y la inversión.
Por ejemplo, Luis Fernando Mejía, presidente de Fedesarrollo, opina que:
La reforma tributaria debe contemplar, además de las exenciones a las empresas y el aumento de la progresividad de la tributación, tener en cuenta la inversión, que es la que genera el recaudo del país, y el ajuste fiscal, que es producto de la necesidad de reducir la deuda pública.
En relación con Fedesarrollo, Anif, en su informe Reforma tributaria: aciertos y discusiones, dice que:
Aumentar la base de contribuyentes es clave para que la carga tributaria esté mejor repartida. Como lo resaltamos anteriormente, el grueso del ingreso de renta recae de manera desmedida sobre las personas jurídicas. Específicamente, el 80 % del recaudo total corresponde a personas jurídicas y tan solo el 20 % a personas naturales. Ese desequilibrio es un problema sencillamente porque es un claro desincentivo a la generación de empleo y a la inversión.
En contravía con los anteriores argumentos, el ministro Ocampo se muestra satisfecho, pues la reforma tributaria cuenta con la aprobación de la Ocde. Al respecto, manifestó:
Me siento muy optimista de que estemos dando un paso en esa dirección, ya que la Ocde respalda aspectos como la progresividad y la eliminación de muchos beneficios con énfasis especial en personas naturales de altos ingresos
De igual forma, Ocampo se siente satisfecho por recibir el apoyo del FMI y del nobel Josep Stiglitz, quienes dicen que la reforma tributaria busca gravar la riqueza, lo que generará sistemas más progresivos y redistributivos. Ocampo dijo que:
La reforma tributaria busca cumplir con esos fines: responder a las demandas sociales apremiantes, pero también implementar el ajuste fiscal necesario para retomar una senda de sostenibilidad.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
