En Colombia, el número de personas satisfechas con su tipo de contrato es mayor en los asalariados (81,7 %) que en los trabajadores por prestación de servicios (45,8 %).
En general, los trabajadores con contratos de prestación servicios se encuentran menos satisfechos con sus condiciones laborales.
Uno de los temas que se discutiría en la reforma laboral del próximo año es revisar las formas de contratación. Al respecto, la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez Ríos, afirmó que se busca acabar paulatinamente con los contratos de prestación de servicios, especialmente en el sector público.
Desde su punto de vista, estos van en la dirección contraria de las condiciones dignas que deben proteger a los trabajadores.
El Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario publicó el informe Contratos de prestación de servicios: ¿Cuál es el problema?, en el que analiza la realidad de estos, sus pros y sus contras.
El contrato de prestación de servicios se ha convertido en una forma de contratación usual en Colombia. A diferencia de un contrato de trabajo, está caracterizado por la independencia y autonomía de quien presta servicios personales, y en este sentido su naturaleza se orienta al cumplimiento de funciones y finalización de productos.
Según datos de la UGPP, en el país existen 2,2 millones de cotizantes independientes, los cuales cabrían en esta modalidad contractual.
El informe del Observatorio indica que la figura del contrato por prestación de servicios se está implementando sobre trabajadores con capacidad de prestar servicios profesionales, lo cual se alinea con la naturaleza de dicha figura.
Este año se evidencia un gran contraste entre el porcentaje de empleados por prestación de servicios que se encuentran ocupados en el sector público (20,9 %) y el porcentaje de asalariados (5 %).
Además, el hecho de que los contratos de prestación de servicios se concentran alrededor de los niveles de formación más altos explicaría que el ingreso mediano ($1.333.570) sea mayor que el ingreso mediano de los asalariados ($971.302).
Sin embargo, al observar la satisfacción de los empleados por prestación de servicios, el 21,9 % desearían mejorar su salario, lo cual contrasta con el 16,1 % de los asalariados que desearían mejorar su salario.
Esto podría evidenciar una fuente de subempleo entre la población vinculada mediante prestación de servicios, implicando que las expectativas salariales de esta población no se están cumpliendo.
El número de personas satisfechas con su tipo de contrato es evidentemente mayor en los asalariados (81,7 %) que en los trabajadores por prestación de servicios (45,8 %). Sin embargo, mientras en el 2021 tan solo el 36,2 % de los trabajadores por prestación de servicios reportaban estar satisfechos con el contrato que tenían, en 2022 esta cifra aumentó en 9,6 puntos porcentuales.
El informe entrega cuatro conclusiones sobre los contratos por prestación de servicios en el país: