En el debate La profesión del contador público en vilo se presentaron puntos de vista a favor y críticos del proyecto que busca renovar la profesión contable.
Para algunos, el proyecto presenta falencias, por ejemplo, en su redacción. Sin embargo, el objetivo de todos es lograr un consenso.
En nuestro espacio #ConferenciasActualícese realizamos el debate La profesión del contador público en vilo, en donde contadores públicos compartieron sus puntos de vista, a favor y en contra, alrededor del proyecto de ley que busca modernizar la profesión contable, presentado al Consejo Técnico de la Contaduría Pública –CTCP–.
En el debate intervinieron Jaime Hernández Vásquez, Rafael Franco Ruíz, José Gregorio Arias, Alexánder Rodríguez, Miguel Ángel Acero, Gherson Grajales, Germán Torres y José Hernando Zuluaga como moderador del evento.
Una de las conclusiones es que se debe lograr un consenso entre quienes están a favor y aquellos a los que no les gusta la propuesta presentada por el Comité Nacional para la Reforma de la Profesión del Contador Público.
Afirma Zuluaga, CEO de Actualícese:
Es preciso explorar las diversas formas de pensar hacia dónde debe girar la reforma de la profesión, dejando en claro que ya fue preparado un documento sólido por parte del Comité Nacional.
Para él, de lo anterior se deriva que en las mesas de consenso haya una sana discusión, teniendo como soporte y base dicho documento, que, desde el punto de vista de los propios autores, todavía no está terminado.
Con base en un documento sólido como el presentado por el Comité Nacional pueden darse discusiones cordiales que nos acerquen a una reforma de la profesión del contador público en la dimensión que se requiere, de manera que se vuelva una realidad.
A continuación, se socializan diversos puntos de vista que los invitados compartieron alrededor del proyecto que busca modernizar la profesión contable.
Para Jaime Hernández, el documento presentado se debe revisar, ya que presenta fallas en la redacción, así hayan intervenido contadores públicos y abogados en su realización:
El que hayan intervenido abogados y/o contadores públicos no garantiza necesariamente que estos profesionales sean fuertes en la preparación de documentos para ser puestos a consideración del Congreso de la República.
El anterior punto de vista fue aceptado parcialmente por los miembros del Comité Nacional.
Para Rafael Franco Ruíz, llama la atención que los profesionales de la contaduría en Colombia, un país relativamente pequeño, sean casi un 10 % del número de los contadores públicos que hay a nivel mundial.
Para el académico, se deben tener en cuenta en la redacción de las definiciones las diferencias conceptuales entre conceptos como bien común e interés público; aseguramiento vs. cumplimiento; ganancia vs. valor; firma vs. ejercicio profesional; praxis social vs. práctica social; el concepto de “firma” colocado en el proyecto frente al concepto del ejercicio profesional.
De igual forma, hay que estar atentos a la nueva definición de empresa expresada por el Foro Económico Mundial: “Alianza de grupos de interés para generar valor en forma sostenida y sostenible”.
Gherson Grajales, contador público que participó en los comités que elaboraron la propuesta, dice que está claro que no se propone echar hacia atrás las Normas Internacionales de Contabilidad, tampoco las Normas Internacionales de Auditoría:
La idea es que en el país se continúe con la tarea de racionalizarlas, ya que en Colombia entre el 93 % y el 97 % de las empresas son pymes; por lo tanto, no se puede perder el juicio frente a los Estándares Internacionales, ya que Colombia no es un país de grandes mercados de capital.
Hernández también expresó que hay que considerar incluir en el proyecto el tema de los reportes integrados. Por su parte, José Gregorio Arias manifestó que, así como se ha propuesto derogar la Ley 43 de 1990, también se debería proponer lo mismo con la Ley 1314 de 2009.
Alexander Rodríguez afirmó que la banca, por los efectos de los criptoactivos y las criptomonedas, tiende a modificarse totalmente o a terminarse.
Quienes intervinieron en el debate consideran que se requiere tener en cuenta que la contabilidad y la contaduría son de pensadores, no de seguidores. También se espera que la ley sea una solución a los problemas endémicos de la profesión, por lo que se requiere que se construya en medio de un pensamiento colectivo.
Frente al tema de la gobernanza, algunos de los invitados consideran que la propuesta del Comité Nacional recoge ideas gremiales, por lo que es conveniente mantener la propuesta de una colegiatura para no dejar a la profesión en manos del Gobierno nacional como ocurre en la actualidad.
Finalmente, una de las propuestas es no desarrollar normas internacionales que hagan a un lado el enfoque local. El enfoque de la norma debe ir dirigido a la integración del enfoque local con el internacional.
Los invitados profundizaron en puntos de vista como los siguientes: