Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
La evidencia de auditoría se puede obtener mediante la aplicación de procedimientos de auditoría y de otras fuentes como las auditorías anteriores, fuentes internas o externas a la entidad, entre otras. Esta sirve para sustentar la opinión del auditor y el informe de auditoría.
Para generar un alto grado de confianza y garantizar la transparencia en la información presentada en los estados financieros, es necesario realizar auditorías.
Estas consisten en la revisión objetiva de la información elaborada y presentada por la administración de una entidad.
Con la revisión se busca establecer, mediante la construcción de hechos pasados, si se aplicaron de manera acertada los principios de contabilidad en las prácticas contables y en el procesamiento de la información contable con base en la cual se prepararon los estados financieros.
Ahora bien, no se puede hacer referencia al tema de evidencia de auditoría sin abordar las Normas Internacionales de Auditoría –NIA– relevantes para los auditores y revisores fiscales en el ejercicio de su profesión.
Así, de acuerdo con la NIA 500, el objetivo del auditor es diseñar y aplicar los procedimientos de auditoría que le permitan obtener la evidencia de auditoría suficiente y adecuada para alcanzar las conclusiones razonables en las que pueda basar su opinión.
A continuación, se mencionan 6 aspectos importantes sobre la evidencia de auditoría, expuestos por el Dr. Roberto Valencia, especialista en revisoría fiscal y auditoria
El Dr. Roberto Valencia indica los procedimientos que debe realizar un auditor para obtener la evidencia de auditoría suficiente. Explica, además, los riesgos que deben manejarse mediante los controles establecidos y la aplicación de los procedimientos que permitan reducir tales riesgos en porcentajes mínimos para tenerlos controlados.
Profundiza en este tema consultando nuestro análisis Evidencias en un proceso de auditoría.
La NIA 500 menciona que la evidencia de auditoría es toda la información que utiliza el auditor para llegar a las conclusiones en las que se basa la opinión de auditoría, e incluye la información contenida en los registros subyacentes a los estados financieros y otra información.
El Dr. Roberto Valencia brinda aclaraciones sobre las conclusiones que se deben realizar partiendo de la evidencia, y explica de forma detallada las características de la evidencia de auditoría.
Esto y mucho más lo abordamos en nuestro análisis NIA 500 y la evidencia de auditoría.
La evidencia de auditoría es aquella información o documentación que utiliza el auditor para sustentar sus conclusiones. El Dr. Roberto Valencia, especialista en temas de auditoría y revisoría fiscal, da a conocer los tres aspectos clave para corroborar que la evidencia de auditoría sea confiable.
El Dr. Roberto Valencia responde el siguiente interrogante: ¿puede el revisor fiscal tomar como base auditorías anteriores en la construcción de la evidencia de auditoría?, y menciona lo contemplado en la NIA 330 sobre la confianza en los controles probados hasta dos períodos anteriores.
Continúa tu formación con nuestro análisis NIA 500: lineamientos para obtener evidencia de auditoría.
Toda aquella información no usada por el auditor para llegar a las conclusiones en las que basa su opinión de auditoría no constituye evidencia de auditoría.
El Dr. Roberto Valencia indica cuál es la información que no puede considerarse como evidencia de auditoría y da ejemplos al respecto.
El consultor Roberto Valencia da a conocer las diferencias y las similitudes entre la evidencia de auditoría y los papeles de trabajo. Aclara que existen otros documentos además de los papeles de trabajo que son evidencia de auditoría; por lo tanto, no se puede afirmar que los papeles de trabajo por sí solos son evidencia de auditoría.
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