Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
La OCDE se mostró preocupada por el bajo recaudo de impuestos que presenta Colombia.
Por lo anterior, la recomendación es que más personas naturales paguen impuesto de renta.
Para la entidad, las deficiencias estructurales del sistema tributario colombiano no se han abordado eficazmente.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico –OCDE– presentó su informe Estudios Económicos de la OCDE: Colombia 2022, en el que ofrece una serie de recomendaciones sobre el sistema tributario colombiano.
Una preocupación que muestra la entidad es el bajo recaudo tributario que presenta el país, el cual solo llega al 20 % del PIB. En este punto, la recomendación de la OCDE es:
Recaudar más ingresos procedentes del impuesto a la renta de las personas mediante la reducción del umbral de ingresos a partir del cual los contribuyentes empiezan a tributar, eliminando exenciones y reforzando la progresividad de las tasas impositivas.
El presidente del Centro de Estudios Económicos Anif, Mauricio Santamaría, le da la razón a la recomendación de la OCDE. Dice que existe la necesidad de que más personas naturales tributen renta para equilibrar las cargas y generar mayor formalidad. En La República opinó lo siguiente:
Ampliar la base de personas naturales contribuyentes, con una tasa marginal progresiva. En Colombia, solo 4,5 % de la población económicamente activa paga renta, lo que lleva a que este impuesto se recargue solo en 20 % en las personas naturales versus 80 % jurídicas, contrario a lo observado a nivel global.
Lo anterior implica avanzar en materia de formalización al ampliar la base de declarantes de ingresos.
La OCDE ha destacado que, aunque la reforma tributaria de 2021 fue un buen primer paso, no será suficiente. «Aunque la reforma contribuirá a estabilizar la deuda pública, no implicará una remodelación más profunda del gasto y los ingresos públicos», es la opinión de la entidad.
A pesar de las 20 reformas fiscales realizadas en los últimos 20 años, no se han abordado las deficiencias estructurales del sistema tributario colombiano de forma eficaz.
Otra recomendación de la OCDE es reducir el gasto por impuestos sobre las empresas, así como disminuir la presión fiscal y las distorsiones tributarias de las entidades.
El exdirector de la Dian, Gustavo Cote, afirmó en entrevista con Actualícese que la clase media colombiana hoy no es la misma de dos años atrás, por lo que no se puede pensar en un aumento de la carga impositiva para este grupo:
Como consecuencia de la pandemia, buena parte de la clase media configurada en los años anteriores al 2020 dejó este nivel social para descender e integrar el 42 % de pobres existentes en el país, según cifras oficiales, pues podrían ser aún más.
Para él, con la realidad del panorama colombiano no se puede pensar en un aumento de la carga impositiva de quienes lograron mantenerse en la clase media:
La suma potencial a aportar de manera adicional por esta clase sería ínfima, debido a su restringida capacidad económica. Esta apenas les alcanza para cubrir los impuestos existentes y mantener los gastos familiares básicos.
Recientemente en su visita a Colombia, el economista francés Thomas Piketty recalcó que en Colombia el recaudo tributario es bajo. Este solo representa el 19 % del PIB, cuando en América Latina alcanza el 22 % y en los países de la OCDE el 33 %.
Un problema adicional es que el recaudo del país está basado en impuestos indirectos como el IVA y el GMF, a lo que se le agrega la evasión, morosidad y elusión del impuesto de renta.
Recalcó que actualmente las medianas y pequeñas empresas pagan más impuestos en contraste con las multinacionales, las cuales obtienen beneficios tributarios que van a parar en paraísos fiscales, lo que debería cambiar a través de una reforma fiscal internacional.
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