Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
La inteligencia artificial podría eliminar tareas realizadas durante mucho tiempo por contadores y auditores.
Se espera la generación automatizada de informes y documentos.
Las empresas han confiado cada vez más en la automatización de procesos robóticos para optimizar sus finanzas y operaciones.
Las organizaciones tienen altas expectativas de que la inteligencia artificial –IA– transforme sus departamentos de contabilidad y finanzas, áreas repletas de tareas repetitivas y listas para usar tecnologías que pueden hacer que su personal sea más eficiente y productivo.
Sin embargo, como se afirma en el artículo Businesses aim to harness generative ai to shake up accounting, finance, publicado por The Wall Street Journal, los directores financieros, generalmente conocidos por su aversión al riesgo, están preocupados por la seguridad de los datos y la confiabilidad de las tecnologías, particularmente en un área delicada como las finanzas.
Pero también sienten curiosidad por las eficiencias que podrían obtener en un momento en que muchas empresas buscan oportunidades de reducción de costos, así como la perspectiva de ayudar a abordar la escasez cada vez mayor de contadores.
Los directores financieros han comenzado a experimentar, o al menos considerar, el uso de IA en finanzas. Las empresas están, poco a poco, empleando la tecnología para predecir las preguntas que los analistas harán sobre ganancias, investigar a sus competidores y responder las consultas de los empleados sobre procedimientos internos, como son las políticas contables.
También se espera que el papel del contador se transforme en términos de auditoría cuando este tiene la responsabilidad de revisar los estados financieros de las empresas. Wes Bricker, vicepresidente y codirector del negocio de soluciones de confianza de EE. UU. en PwC, afirma en la publicación:
De la mano de la inteligencia artificial se pueden resumir grandes cantidades de datos, incluidos los resultados de auditoría, y generar códigos para usar en el análisis de datos, entre otros beneficios.
Esta firma de auditoría anunció en abril de este año que invertiría 1000 millones de dólares en inteligencia artificial en sus operaciones de EE. UU. durante los próximos tres años, trabajando con Microsoft y el fabricante de ChatGPT, OpenAI, para automatizar aspectos de sus servicios de impuestos, auditoría y consultoría.
Bricker también dijo que la IA de las empresas plantea datos, sesgos y otros riesgos que los auditores deben considerar en sus evaluaciones:
Como auditores, debemos comprender dónde se ha implementado la IA y el contexto en el que se ha identificado y gestionado ese riesgo.
Por su parte, Ken Tanji, director financiero de la aseguradora Prudential Financial, afirma que los contadores juegan un papel importante para asegurarse de que los datos y la información tengan integridad, una pieza particularmente crucial de la integración de la IA en las finanzas:
Creo que siempre habrá roles para los contadores. Definitivamente, es una disciplina y un conjunto de habilidades que es vital.
La inteligencia artificial podría eliminar muchas de las tareas realizadas durante mucho tiempo por contadores y auditores, lo que daría como resultado la generación automatizada de informes, documentos y presentaciones.
Lo anterior, desde el punto de vista de ejecutivos financieros y asesores corporativos, no significa necesariamente que se recortarán puestos.
En los últimos años, las empresas han confiado cada vez más en la automatización de procesos robóticos para optimizar sus finanzas y operaciones, particularmente mediante el procesamiento de datos de nómina o informes de gastos y la revisión de documentos legales.
También han aprovechado otros tipos de inteligencia artificial, incluido el aprendizaje automático, para predecir varios escenarios financieros y pronosticar flujos de efectivo futuros.
La IA promete ser la última herramienta para ayudar a las empresas a mejorar su capacidad para pronosticar su desempeño, cerrar los libros más rápido y realizar análisis de datos para fortalecer las decisiones de inversión.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
