Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Es importante destacar que las díneas directrices son la principal norma global para los países miembros de la OCDE en relación con la conducta empresarial responsable.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha actualizado las Líneas Directrices para Empresas Multinacionales sobre la Conducta Empresarial Responsable en respuesta a las prioridades sociales, medioambientales y tecnológicas que están presentes en la sociedad y en el orden mundial.
Estas actualizaciones incluyen recomendaciones para que las empresas se alineen con los objetivos internacionales establecidos en materia de cambio climático y biodiversidad.
Asimismo, se introducen expectativas de diligencia debida en el desarrollo, financiación, venta, concesión de licencias, comercio y uso de la tecnología, lo cual abarca la recopilación y el uso de datos.
La @OECD actualizó las Líneas Directrices para Empresas Multinacionales sobre la Conducta Responsable que ellas deben tener. Incluye recomendaciones clave sobre #DerechosHumanos, #CambioClimático y tecnología, entre otras. https://t.co/i948Vhmdtn#OECDGuidelinesUpdate
— MinComercio Colombia (@MincomercioCo) June 8, 2023
También se ofrecen recomendaciones sobre cómo se espera que las empresas actúen de manera diligente en relación con los impactos y las relaciones comerciales vinculadas al uso de sus productos y servicios.
Además, se busca brindar una mayor protección a las personas defensoras de derechos y a grupos en situación de riesgo, incluyendo aquellos que expresan preocupación por la conducta de las empresas.
Se han actualizado las recomendaciones sobre la divulgación de información relacionada con la conducta empresarial responsable, y se han ampliado las recomendaciones sobre diligencia debida para abordar todas las formas de corrupción.
También se presentan sugerencias para que las empresas aseguren que las actividades de los grupos de presión sean coherentes con las Directrices.
Asimismo, se han fortalecido los procedimientos para garantizar la visibilidad, eficacia y equivalencia funcional de los Puntos Nacionales de Contacto sobre Conducta Empresarial Responsable.
Es importante destacar que las Líneas Directrices son la principal norma global para los países miembros de la OCDE en relación con la conducta empresarial responsable, y tienen una amplia aplicación tanto en las políticas públicas como en la práctica empresarial.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
