Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Al crear empresa es importante conocer los diferentes tipos de sociedad que existen, recomienda Nicolás Alviar.
El nombre de la empresa es esencial para identificarse ante la ley y es la primera impresión que se dará a clientes y al mercado.
Ten en cuenta las recomendaciones que a continuación brindamos.
Nicolás Alviar, abogado especialista en Derecho de Negocios Internacionales, socio fundador y gerente general de AGT Abogados, brinda algunas recomendaciones a las personas que están interesadas en iniciar un proceso para crear empresa, estas deben analizar y tener en cuenta diversos aspectos jurídicos:
La creación y registro de empresas en Colombia es un proceso que requiere atención y regulación. Esto es esencial para aprobar su actividad económica ante los diferentes entes nacionales.
Antes de crear una empresa, desde su punto de vista, es esencial tener un concepto claro en mente. Al momento de definir una idea, la persona debe responder una serie de preguntas como:
El nombre de la empresa es esencial para identificarse ante la ley y es la primera impresión que dará a sus clientes y al mercado.
Recomienda que para establecerlo se debe verificar si está disponible en la base de datos del Registro Único Empresarial –Rues–. Si el nombre ya está registrado en la Cámara de Comercio, se debe elegir uno nuevo que sea similar al que se necesitas.
Es importante conocer los diferentes tipos de sociedad que existen antes de registrar una empresa. Las obligaciones tributarias y responsabilidades legales que impone la ley varían dependiendo el tipo de empresa que se tenga.
Los tipos de empresas son: de persona natural, como es el caso del comerciante que ejerce su actividad de manera habitual y profesional, no es responsable del IVA y su contabilidad puede ser llevada en un libro fiscal. Si se es responsable del IVA y se factura, la contabilidad debe ser llevada por un contador público.
El segundo tipo es la personería jurídica, una entidad ficticia con capacidad para ejercer derechos y contraer obligaciones. Incluye todas las clasificadas como corporaciones o fundaciones.
Si es establecimiento de comercio, se trata de un conjunto de bienes organizados para cumplir los fines de una empresa. Puede ser propiedad de una persona natural o jurídica y puede tener varios establecimientos.
Dicho lo anterior, si una persona se quiere formalizar, por ejemplo, a través de una persona jurídica, debe preguntarse: qué actividades se van a realizar, bajo qué tipo societario se van a realizar, cuántos socios habrá, entre otras.
Antes de escoger el tipo societario hay que conocer el mercado al cual usted se va a dedicar. Consulte si hay una regulación específica que se exija para este.
Al hablar de personas jurídicas existen: sociedad por acciones simplificadas –SAS–, sociedad limitada, anónima, comandita simple, comandita por acciones, empresa asociativa de trabajo, empresa unipersonal.
Alviar afirma que es importante tener en cuenta está lista para investigar y evaluar cuál será la mejor opción para su negocio.
Lo anterior ayudará a asegurarse de que se cumple con todos los requisitos necesarios y facilitar la creación de la empresa.
Una vez elegido el nombre de la empresa se deben redactar los estatutos que regulen las relaciones entre los diferentes miembros de la misma. Estos serán la base fundamental del funcionamiento y responsabilidades de la empresa, por lo que es recomendable que sean revisados por un profesional especialista en el tema para evitar conflictos futuros.
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