Las entidades que contratan servicios en los que se incluye la figura de administración, imprevistos y utilidades –AIU– deben tener presente algunos aspectos para su contabilización, entre los que se encuentran las bases gravables especiales del IVA y de la retención en la fuente.
El prorrateo del IVA es un procedimiento que debe realizarse al liquidar el impuesto a las ventas, cuando se adquieren bienes y servicios para generar ingresos de operaciones gravadas, exentas y excluidas del IVA.
Explicamos cómo efectuar dicho procedimiento y cuáles contabilizaciones realizar.
El Consejo Técnico de la Contaduría Pública –CTCP– explica que una entidad clasificada en el grupo 2 de convergencia debe contabilizar los arrendamientos financieros conforme a la sección 20 del Estándar para Pymes.
La citada norma señala que los arrendamientos financieros deben reconocerse simultáneamente como un activo y un pasivo medidos por el menor importe entre el valor razonable del bien arrendado y el valor presente de los pagos mínimos de arrendamiento, más los costos relacionados con la negociación y acuerdo del arrendamiento.
Un contador bien preparado puede proporcionarle a la organización en la cual presta sus servicios las mejores alternativas para optimizar la capacidad de planta y la explotación del recurso financiero, sin que ello represente, una evasión o una elusión de las normas contables y tributarias.
Los inventarios de fácil destrucción o pérdida son aquellos que, por sus condiciones naturales, tienden a sufrir daños físicos con facilidad. Es el caso de productos perecederos (alimentos) o volátiles (ACPM o gasolina). Para su tratamiento contable debe tenerse en cuenta lo siguiente:
Los estados financieros preparados bajo Estándares Internacionales muestran la realidad de la compañía al cierre de un período. Dada la naturaleza financiera de la información, es común que en muchas ocasiones deba hacerse uso de las matemáticas financieras para la medición de sus elementos.
Las partidas monetarias en moneda extranjera deben contabilizarse a la tasa de cambio de la fecha de reconocimiento inicial, y ajustarse, al final de cada período. Este tratamiento difiere de lo establecido en las normas fiscales. Explicamos qué hacer con las cuentas bancarias en moneda extranjera.
La sección 17 del Estándar para Pymes emitida por el IASB en el 2015 permite el uso del modelo de revaluación para propiedades, planta y equipo. En este editorial se explica la metodología de revaluación con eliminación de la depreciación y por reexpresión de la depreciación.
Ni los Estándares Internacionales ni las normas fiscales permiten reconocer los intangibles formados internamente. No obstante, es posible que una empresa venda una marca y genere un ingreso. Explicamos cómo reconocer contable y fiscalmente este tipo de transacciones.
Los certificados de depósito a término –CDT– deben contabilizarse por el método del costo amortizado descrito en la sección 11 del Estándar para Pymes. En este editorial exponemos tres casos prácticos, con plazos y tasas de intereses distintas, con el fin de ilustrar este método.
Las entidades en muchas ocasiones requieren realizar mejoras en los bienes que mantienen en arrendamiento para el desarrollo de su actividad económica. Frente a esta situación es necesario determinar si es posible reconocer estas mejoras como un activo o si deben llevarse directamente al gasto.
Las marcas son signos comerciales que permiten identificar bienes, servicios o establecimientos comerciales en el mercado. Las entidades pueden construirlas internamente o adquirirlas de otras compañías mediante una transacción comercial. Examinamos en qué casos pueden reconocerse como intangibles.