Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
“Si el día de mañana hacemos una reforma tributaria, no será para subir tarifas sino para hacer más ágil y eficaz el recaudo. Ustedes pueden estar tranquilos, señores inversionistas, sobre la estabilidad en las reglas de juego”, dijo el mes pasado el presidente Juan Manuel Santos.
Hoy, la reforma se ve más cercana de la mano del ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, quien el pasado lunes, en entrevista con Portafolio le hizo un guiño a las declaraciones del primer mandatario de los colombianos. «El objetivo fundamental de la nueva reforma de impuestos es estimular la generación de negocios para aumentar el recaudo», aseguró.
Los industriales colombianos ha sido uno de los grupos que más fuerza ha venido haciendo para que el Gobierno acelere la presentación de la reforma tributaria al Congreso. Luis Carlos Villegas, presidente de la Andi, dice que más del 50% de los empresarios está desarrollando proyectos de inversión, mientras las dos terceras partes de sus planes de ensanche ya se están ejecutando.
Para la Andi, es necesario que la reforma tenga cinco puntos principales: Bajar las tarifas del Impuesto de Renta, descontar los gravámenes de los bienes de capital importados para inversión, simplificar las tarifas del IVA, ampliar el IVA a una mayor base de productos manufacturados y servicios y simplificar el Estatuto Tributario.
Mauricio Cárdenas Santa María, exministro de Transporte y de Desarrollo y actual director de la Iniciativa para América Latina del Brookings Institution, le dijo a El Colombiano piensa que hay que hacer algo al respecto de los impuestos temporales que se vuelven permanentes.
«Creo que el país ha asimilado más el impuesto al patrimonio que el impuesto a las transacciones financieras. Ojalá el Gobierno se decida y aborde el tema, porque de esos impuestos no se sale sino es por la vía de un aumento en la tributación a la renta y especialmente de personas naturales. En Colombia pagamos muy pocos impuestos las personas naturales».
Una de las propuestas básicas sería la de bancarizar a la mayor parte de la población. La idea es que, en la medida en que se transe menos en efectivo y más con tarjeta débito, la DIAN podrá hacer un seguimiento puntal a los contribuyentes, para cerrarle el paso a la evasión, develar cuáles son los servicios que realmente prestan entidades que hoy por ley no pagan impuestos y hacer más equilibrado el sistema.
Aquileo Ricardo, uno de nuestros navegantes piensa que, «me parece una falta de respeto hacia los ciudadanos que nos quieran imponer el uso de los servicios bancarios sabiendo que tienen altos costos. Se ve que los banqueros tienen la mano metida en todas estas reformas. No se quiénes son mas sinverguenzas, si los bancos que es el único sector de la economía que nunca está en crisis o nuestros gobernantes que realizan este tipo de favores».
Justo Rengifo, por su parte, quiere que se revisen las excepciones y beneficios de las que gozan los que pueden contribuir con mayores impuestos, para solucionar las condiciones sociales de tantos colombianos que la necesitan.
Everth Samboni dice que «los favores políticos empezaron con la creación del dos por mil, el cual ya va en cuatro por mil; se creó por un solo periodo y como les resultó rentable lo eternizaron. El sector bancario siempre ha sido el consentido por todos los gobiernos, a pesar de los elevados costos de sus productos».
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