Las tecnologías de Comunicaciones Unificadas y de Colaboración -UCC- se convierten en herramientas tanto para empleadores como empleados que incursionan en el Teletrabajo. Una respuesta inmediata, comunicación en tiempo real y flexibilidad para las partes son fundamentales en este proceso.
Las tecnologías de Comunicaciones Unificadas y de Colaboración -UCC- se convierten en herramientas tanto para empleadores como empleados que incursionan en el Teletrabajo. Una respuesta inmediata, comunicación en tiempo real y flexibilidad para las partes son fundamentales en este proceso.
Las estadísticas indican que la dinámica laboral viene cambiando en el mundo. Según la consultora de mercado IDC, 37,2% de la fuerza de trabajo mundial pertenece a trabajadores móviles; se prevé que para 2016 aumente a 1,300,ooo,ooo de personas. Además, IDC asegura que 45% de las compañías en Latinoamérica planea alinear sus esfuerzos hacia una estrategia definitiva de movilidad.
La incorporación del Teletrabajo (la «fuerza de trabajo móvil») supone varios retos para las empresas en cuanto a la adopción e implementación de tecnologías y herramientas que permitan la conectividad desde cualquier lugar, en cualquier momento y mejoren el rendimiento de los profesionales.
La buena noticia para las organizaciones es que las UCC han evolucionado y madurado significativamente. En la actualidad, proporcionan desde voz y video en alta definición, chat, mensajería unificada, hasta la integración de diferentes equipos.
Las UCC empoderan a las empresas porque les permiten habilitar una fuerza de trabajo móvil y maximizar su productividad mediante la integración de servicios de comunicación adecuados a las necesidades de cada persona, BroadSoft, proveedor mundial de UCC, plantea cuatro razones por las que el trabajo remoto funciona gracias a las herramientas de colaboración, que, junto a las de comunicaciones unificadas, adoptan el espíritu de teletrabajadores (trabajadores remotos), facilitando así la integración entre las diferentes aplicaciones de comunicación y colaboración:
Un estudio de la organización sin ánimo de lucro Common Sense, dedicada a estudiar los efectos de las nuevas tecnologías en las familias, muestra que 72% de los adolescentes y 48% de los adultos sienten la necesidad de responder inmediatamente a los mensajes y notificaciones que reciben. Los empleadores se enfrentan a la misma necesidad de inmediatez entre los empleados, quienes deben gestionar un flujo continuo de comunicación e información a través de diversos dispositivos y ubicaciones, lo que puede resultar complicado para los teletrabajadores.
Con una fuerza de trabajo dispersa, el compromiso de los empleados es un reto. No es lo mismo utilizar herramientas independientes para conectar a los trabajadores entre sí, que una experiencia integrada que fomenta colaboración y compromiso entre todo el equipo. Es preciso tener espacios de trabajo holísticos donde los individuos- dentro y fuera de la organización- puedan crear, unirse y dirigir el negocio con facilidad, además de proporcionar herramientas que permitan el intercambio rápido de ideas y contenido. Las UCC brindan este nivel de compromiso para equipos funcionales y trabajadores móviles.
Hoy, un teletrabajador debe comunicarse y colaborar con colegas, clientes y socios a través de una serie de diferentes aplicaciones, y a menudo hay que pasar de una aplicación a otra para mantener toda la información sincronizada. A menos que se pueda tener acceso a estas aplicaciones utilizando una única interfaz, la productividad de los teletrabajadores puede verse afectada.
Las UCC ofrecen una interfaz intuitiva de rápido acceso que integra las aplicaciones preferidas de un trabajador remoto con la capacidad de comunicarse en tiempo real, acceder y compartir archivos, así como tener información contextual, pertinente y a la mano.
Para definir el tipo de comunicación que se tendrá con los teletrabajadores es importante conocer sus hábitos y preferencias personales. Actualmente los Millenials (personas nacidas entre 1980 y 2000) son, en número, la mayor generación en América, y, por tanto, constituyen uno de los mayores factores de cambio para las comunicaciones empresariales. La comunicación digital es natural para los Millenials, que esperan encontrar en sus lugares de trabajo la misma instantaneidad que disfrutan en sus vidas privadas.
Actualmente, los teletrabajadores requieren flexibilidad para utilizar las aplicaciones, dispositivos y servicios que se adaptan a su estilo de trabajo, mientras que las empresas suelen establecer parámetros uniformes para evitar la complejidad de administrar, soportar y asegurar decenas de aplicaciones dispares.