Existen diferentes tipos de control que se pueden aplicar para garantizar el logro de los objetivos y planes estratégicos de una organización y a su vez otorgar una seguridad razonable sobre la información de la misma. En este editorial abordaremos el control estratégico y de gestión.
Existen diferentes tipos de control que se pueden aplicar para garantizar el logro de los objetivos y planes estratégicos de una organización y a su vez otorgar una seguridad razonable sobre la información de la misma. En este editorial abordaremos el control estratégico y de gestión.
El control en las organizaciones se ha convertido en una herramienta que brinda una seguridad razonable de la continuidad del negocio y permite valorar si la empresa está avanzando de forma satisfactoria hacia sus metas y objetivos. La implementación de un sistema de control interno permite el acceso a información cuantitativa y cualitativa de la organización para planificar procesos, ejecutarlos, evaluarlos y mejorarlos.
Para garantizar que el control permanezca en el pasado, presente y futuro de la organización se requiere conocer e implementar los tipos de control como parte de la gestión administrativa de la organización. Con esto en mente, a continuación mencionamos el control estratégico y de gestión.
El control estratégico se estructura a partir de la planificación de políticas, objetivos y planes de acción diseñados con el fin de satisfacer a los socios, clientes y usuarios de la información en general. A continuación, nos adentraremos en la definición de estos tres elementos:
A través del control de gestión se busca un correcto funcionamiento de la organización y un adecuado desarrollo de las funciones de los colaboradores. Asimismo, implementando sistemas y mecanismos que apoyen esta gestión, se desea lograr el cumplimiento de los objetivos y planes estratégicos.
El control de gestión, el cual se fundamenta en controles y evaluaciones a través de indicadores de desempeño, productividad, eficiencia, innovación, calidad, entre otros, también sirve para controlar los recursos de la organización, evidenciando si se hace un uso eficiente y eficaz de estos en el desarrollo de las actividades.
Atender el control de gestión en las organizaciones permite dar una seguridad razonable de que la información y los registros son veraces, permite definir y aplicar medidas de prevención de riesgos, hacer seguimiento de la gestión de la organización con el fin de establecer mejoras, reestructurar políticas o implementar nuevos procesos.