Unas de las herramientas que utiliza el auditor para desenmarañar el sistema económico de la entidad y los múltiples procesos que permiten que esta cumpla su objeto misional, son los cuestionarios de auditoría; estos son herramientas que permiten al auditor apoyar su gestión en el control interno.
La auditoría se apoya en una de las herramientas más antiguas utilizadas por el ser humano para la comprensión de su entorno, la observación. Cuando un auditor llega a una organización el objetivo principal para iniciar su evaluación es obtener información que le permita entender a qué se dedica la empresa, cuáles son sus transacciones cotidianas e identificar el ambiente de control que pueda existir.
Unas de las herramientas que utiliza el auditor para desenmarañar el sistema económico de la entidad y los múltiples procesos que permiten que esta cumpla su objeto misional, son los cuestionarios de auditoría; estos son herramientas que permiten al auditor apoyar su gestión en el control interno y le proporcionan información para determinar un diagnóstico de la empresa.
La información que se obtiene de los cuestionarios de evaluación del sistema de control interno sirve para conocer qué grado de control maneja la entidad y la participación de los colaboradores de la organización con el mantenimiento de un ambiente de control ya que por sí solo el cuestionario de auditoría no es más que un documento inerte. En ese sentido, es función del auditor velar porque la información sea suministrada por alguien que conozca los procesos de la compañía, por lo general por el gerente, el administrador de la empresa o la persona encargada y que en este documento se anexe información tanto cualitativa como cuantitativa del proceso a auditar.
Conforme a la NIA 300 el auditor debe realizar una planeación de auditoría, por lo tanto, el objetivo principal del cuestionario es documentar la planeación de auditoría: en este se debe incluir el alcance, los objetivos, los recursos asignados para el proceso y los tiempos de ejecución de labores.
Por lo general, dependiendo del objeto social de la entidad, para evaluar se utilizan diferentes ciclos o áreas. Entre estas, las que pueden generar mayor riesgo para la entidad, o considerarse como vulnerables, son el área de tesorería, nómina, producción, entre otras que identificará el auditor a cargo.