Si una entidad concluye que recuperará el costo de los inventarios por medio de su uso o venta, deberá reconocer el deterioro por la diferencia entre el valor en libros y el precio de venta estimado, menos los costos de terminación y venta. La probabilidad de venta es un aspecto a evaluar.
Si una entidad concluye que recuperará el costo de los inventarios por medio de su uso o venta, deberá reconocer el deterioro por la diferencia entre el valor en libros y el precio de venta estimado, menos los costos de terminación y venta. La probabilidad de venta es un aspecto a evaluar.
La prudencia, según el párrafo 9 de la sección 2 del Estándar para Pymes, es uno de los principios para tener en cuenta en la preparación y presentación de información financiera, el cual busca que el valor de los activos no esté sobrevalorado.
Tanto la sobrevaloración de los activos e ingresos como la infravaloración de los pasivos y gastos crean distorsiones en los estados financieros y dificultan la medición de la situación o el desempeño financiero de las compañías.
Para los inventarios, según el párrafo 4 de la sección 13 del Estándar para Pymes, se establece que las entidades deben medirlos al menor importe entre el costo y el precio de venta estimado, menos los costos de terminación y venta.
Además de la disminución en el precio de venta estimado, se presentan otras circunstancias que también pueden generar deterioro de valor de los inventarios, como son la obsolescencia o la baja rotación. En conclusión, el primer aspecto que se debería evaluar es la probabilidad de venta, pues, si la entidad concluye que los inventarios son de difícil salida o su comercialización es lenta, deberá reconocer el deterioro de valor de las mercancías.