Mauricio Gómez afirma que se viene trabajando en una propuesta sobre los procesos educativos y la dinámica de cambio de la profesión contable.
Hernando Bermúdez dice que las instituciones de educación superior invierten muy poco en la infraestructura necesaria para una adecuada educación contable.
Mauricio Gómez afirma que se viene trabajando en una propuesta sobre los procesos educativos y la dinámica de cambio de la profesión contable.
Hernando Bermúdez dice que las instituciones de educación superior invierten muy poco en la infraestructura necesaria para una adecuada educación contable.
En medio de las discusiones que se vienen desarrollando desde 2020, a través de los comités nacionales liderados por el Consejo Técnico de la Contaduría Pública –CTCP–, y que buscan la modernización de la Ley 43 de 1990, hay un espacio para que la educación contable también dé un paso adelante y se gradúen profesionales con conocimientos a la vanguardia de los Estándares Internacionales.
Mauricio Gómez Villegas, profesor de la Universidad Nacional de Colombia, exsubcontador general de la nación, es el presidente del Comité Educativo de la Reforma a la Ley 43 de 1990, y destaca el papel que viene desarrollando la Mesa de Expertos en Educación Contable en medio de este proceso.
El objetivo de la mesa es presentar una propuesta al ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, que describa los procesos educativos y la dinámica de cambio de la profesión.
«Concretamente se está realizando una investigación colectiva que nos lleve a documentos técnicos y a una propuesta de documento normativo sobre el estado de la educación profesional contable en Colombia, para que a partir de un diagnóstico y una prospectiva se construyan algunos derroteros de transformación profesional, especialmente en su vínculo con la universidad. Estamos pensando, construyendo argumentos basados en evidencias, consensuando, planteando y actuando», explica Gómez Villegas.
Explica que se está trabajando en un documento que se compartirá con la comunidad académica, el cual contiene temas como evolución y estructura legal de la profesión y su enseñanza en el país; fundamentos pedagógicos y didácticos de los programas; y modalidades de enseñanza.
De igual forma, abarca los temas de la integración de los diversos niveles de enseñanza; la relación con los procesos de certificación; la estructura de la oferta educativa en el país; las necesidades en el contexto organizacional, empresarial y productivo; y las implicaciones de las disrupciones tecnológicas y digitales en los procesos organizacionales y en la profesión.
«Un análisis puede abrir el espacio a una etapa prospectiva de mayor alcance. En este proceso se ha interactuado con académicos, documentado con evidencia la estructura de la enseñanza y evaluado su calidad. La idea es que, en el futuro, la profesión tenga una transformación», puntualiza.
Instituciones invierten muy poco en la infraestructura para una adecuada educación contable
Hernando Bermúdez Gómez, profesor asociado del Departamento de Ciencias Contables de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, coordinador del Centro de Estudios en Derecho Contable y editor de Contrapartida afirma en entrevista con Actualícese que las instituciones de educación superior, no solo las universidades, están invirtiendo muy poco en la infraestructura necesaria para una adecuada educación contable.
«Por lo tanto, deberían fortalecerse los criterios mínimos de calidad que todos debemos cumplir; específicamente, los temas relacionados con los sistemas de información y con el acceso a la documentación técnica requieren de grandes recursos», aconseja.
Desde su punto de vista, los profesores deben demostrar su competencia ante nuestros pares. Hay muchas formas: exposiciones, escritos, participación en centros de estudios, en redes académicas, etc.
«Debemos demostrar que la ética está primero que los estándares de la práctica. Se puede apoyar, dudar o contradecir, pero debe ser con argumentos y no con pasiones ni con retórica», dice.
Se necesita evidencia de todo lo que se afirma. Esa competencia debe corresponder a la frontera del conocimiento y no a lo que se popularizó hace un tiempo.