Ingresos, gastos, deudas e intereses se conjugan para realizar un balance y determinar la capacidad de pago, es decir, la cuota máxima que se puede pagar por un crédito solicitado por una persona. En este editorial le explicamos la forma en que un banco define con cuánto se puede endeudar una persona.
Ingresos, gastos, deudas e intereses se conjugan para realizar un balance y determinar la capacidad de pago, es decir, la cuota máxima que se puede pagar por un crédito solicitado por una persona. En este editorial le explicamos la forma en que un banco define con cuánto se puede endeudar una persona.
Antes de adquirir cualquier deuda, por pequeña que sea, se debe realizar un balance de los ingresos, gastos actuales y deudas vigentes, así como de los intereses que habrá que pagar por el nuevo crédito adquirido.
Este cálculo permite determinar la capacidad de pago, es decir, la cuota máxima que se puede pagar por un crédito. Dicho de otra manera, es la capacidad que se tiene para endeudarse sin caer en la morosidad y atendiendo las necesidades del hogar. Para estimar dicha capacidad de pago se debe determinar el ingreso mensual y restarle todos los gastos, de manera que el resultado sean los ingresos libres de cualquier obligación: Capacidad de pago = ingreso mensual – gasto mensual.
Es importante que cada persona haga este análisis de forma estricta y realista. Se debe evitar calcular la capacidad de pago con base en supuestos. No se debe decir: “el mes entrante reduciré mis gastos a la mitad y así pagare las cuotas del crédito”, ya que este tipo de reducciones drásticas pocas veces se pueden lograr y pueden poner en peligro la estabilidad financiera del hogar.
La capacidad de pago es un factor preponderante a la hora de adjudicar un crédito por parte de una entidad financiera. Es responsabilidad de los bancos determinar si su cliente potencial cuenta con la capacidad suficiente para hacerse cargo de la deuda. Si los bancos no realizaran este análisis y adjudicaran créditos sin estudios, se pondría en riesgo la seguridad del sistema financiero y las personas terminarían con créditos que no están en condiciones de pagar.
Lo anterior no significa que los bancos solo le prestan a los que tienen dinero, significa que prestan en plazos y modalidades consecuentes con la capacidad de pago de sus clientes.
El banco siempre analiza la capacidad de pago de la persona basada en los ingresos y el endeudamiento con él mismo u otras instituciones financieras, y, de acuerdo con esta acción previa, aprueban un valor. Este valor corresponde al monto que la entidad considera que el cliente tiene la posibilidad de pagar.
Paso siguiente. El banco revisa el historial crediticio de la persona, analiza que los ingresos sean reales y que los gastos mensuales sean acordes a su realidad económica. Con base en el anterior análisis determina cuánto puede destinar para el pago de la cuota de un crédito y así define el cupo aprobado, el plazo más conveniente y la tasa de interés de acuerdo con el plazo y el tipo de crédito.
Calcular periódicamente su capacidad de pago le traerá beneficios como: