El reconocimiento de los activos, pasivos, ingresos y/o gastos bajo Estándares Internacionales implica examinar el cumplimiento de ciertos lineamientos, para que estos puedan ser incorporados de acuerdo con su clasificación en cada una de las partidas que componen los estados financieros.
El pasado 31 de octubre de 2018 el Gobierno nacional finalmente radicó ante el Congreso el proyecto de ley de financiamiento, cuya estructura trae grandes cambios para personas naturales y jurídicas respecto de las obligaciones a nivel impositivo.
Un activo intangible es identificable, de carácter no monetario y sin apariencia física. Con relación a ello, la sección 18 del Estándar para Pymes establece que no se podrán reconocer como activos intangibles aquellos que hayan sido formados, sino solamente los adquiridos.
La implementación de Estándares Internacionales conllevó a que se introdujeran conceptos de medición y procedimientos adicionales, que implican la generación de diferencias cuya identificación es indispensable en el proceso de cierre que deben ejecutar las organizaciones al final de 2018.
Cuando hablamos de estrategia en las empresas, nos referimos, entre otras cosas, a escoger, tomar decisiones, competir y ser sostenibles en el tiempo. El pensamiento estratégico hace alusión a pensar en aras de ser viables en el futuro, generando transformaciones sin culpa ni trauma.
El deterioro en el valor de los activos puede ser ocasionado por factores externos como las condiciones económicas, legales y políticas, o por factores internos como la obsolescencia o la disminución del rendimiento del bien. Dependiendo de ello la entidad, deberá calcular y reconocer el valor dicho deterioro.
El 29 de marzo de 2018, la Junta de Normas Internacionales de Contabilidad –IASB– emitió el marco conceptual de los nuevos marcos técnicos normativos, el cual agrupa las definiciones, conceptos y lineamientos que son base para la preparación de la información financiera.
El auditor debe expresar una opinión modificada en el informe de auditoría cuando considere que los estados financieros en su conjunto no se encuentran libres de incorrección material, o cuando no pueda obtener evidencia de auditoría alguna.
El provecho tributario es entendido como la alteración, desfiguración o modificación de los efectos tributarios en cabeza de uno o más obligados, tal como la eliminación, reducción o diferimiento del tributo; el incremento de saldos a favor, la extensión de beneficios tributarios, entre otros.
La virtualización de las operaciones implica que la información en las organizaciones esté sujeta a la ocurrencia de delitos informáticos. En tanto, el revisor fiscal, dentro de su proceso de auditoría, deberá percatarse de la calidad de las herramientas utilizadas para salvaguardar la información.