Esteban Correa afirma que el propósito del contador es revelar la complejidad de los hechos económicos, lo que se expande a dimensiones ecológicas y sociales.
Dueños del capital, grandes corporaciones y gobiernos deberían comprometerse a fortalecer regulaciones ambientales y hacerlas cumplir.
En este editorial realizamos un repaso del estado actual de la profesión, analizando, por un lado, la cantidad de contadores inscritos ante la Junta Central de Contadores –JCC– y, por otro lado, el número y el tipo de sanciones impuestas por este ente.
Ruth Alejandra Patiño afirma que los conocimientos contables y la enseñanza son distintos entre regiones, porque el contexto de aplicación es distinto.
En ciudades pequeñas prácticamente no existen empresas del grupo 1, razón por la cual los contadores se enfocan en los Estándares para Pymes.
Leonardo Varón afirma que los costos de los trámites contables deben racionalizarse.
Es necesaria la actualización del Código de Comercio, y la figura de la revisoría fiscal.
El problema no es cuánto pagan los clientes, sino que estos no vean al profesional contable como alguien que genera valor.
Contadores pueden dedicar más tiempo a analizar e interpretar datos para extraer un valor real para el negocio y sus clientes.
A medida que se aplica la inteligencia artificial se observan tres áreas contables que se benefician: contabilidad invisible, auditoría continua e información activa.
Para Flor Stella Quiroga, la profesión adolece de un estudio con estadísticas de honorarios que permitan dibujar un panorama en la materia.
Hay que preguntarse si el conocimiento, la competencia de los miembros del Tribunal Disciplinario de la JCC y del personal que los auxilia son idóneos.
Óscar Darío Morales y Hernando Bermúdez Gómez coinciden en que los organismos de la profesión carecen de credibilidad y son poco activos.
Pese a que los salarios de los contadores han mejorado, continúan siendo bajos.
Orientación del Consejo Técnico de la Contaduría Pública fue rechazada por muchos.
Para Daniel Sarmiento Pavas, desde la llegada del actual Gobierno se entró en una fase de desmoronamiento de los órganos profesionales y la profesión se politizó.
Afirma que los contadores peleamos entre nosotros, contra personas o ideologías, y dejamos pasar por alto situaciones graves.
Ofrecer un empleo basado en proyectos que brinden oportunidades para el crecimiento y el desarrollo profesional puede ampliar el equipo de trabajo.
La cultura del lugar de trabajo juega un papel importante en la capacidad de una empresa para construir y retener una fuerza laboral.
Paula Franco, presidente de la OCC, afirma que las «armas» del contador del futuro son la visión estratégica y el marketing digital.
Hoy, el contador público debe tener en cuenta todos los cambios legislativos, en diferentes áreas, y cultivar una relación cercana y abierta con su cliente.