Hay que hacer una revisión estructural de la concepción del Estándar para las Pymes. Luego del período de transición, con las situaciones que se han presentado en las empresas, vale la pena preguntarse si realmente representa un modelo más simple en cuanto al reconocimiento y medición.
El año gravable 2016 es el último en que las personas naturales deberán analizar a qué categoría tributaria pertenecen. Recordemos que al momento de elaborar la declaración es necesario disponer de varios documentos que facilitarán la determinación del patrimonio, exenciones y retenciones a favor.
Cuando se ha hecho la aplicación por primera vez de IFRS, cesa la dualidad de registros y todos deben asentarse en un solo conjunto de libros. No hay tal “doble contabilidad”. Lo que se usa son las áreas de valoración o cálculos previos diferentes.
Hay que profundizar la auditoría en materia de control interno, resaltando que la expresión de una opinión debe versar sobre su eficacia, razón por la cual debe ser mucho más extensa que los procedimientos que se analizan dentro de una auditoría financiera.
En esta capsula NIA se abordan los hechos que llegan a conocimiento del auditor con posterioridad a la fecha del informe de auditoría, pero con anterioridad a la fecha de publicación de los estados financieros.
La guía de control de calidad para pequeñas y medianas firmas de auditoría elaborada por la federación internacional de contadores –IFAC–, puesto que en nuestro país la mayoría de las empresas son pymes, puede considerarse como una herramienta de gran ayuda para la gestión de auditoría.
Un tema de vital importancia antes de elaborar la declaración de renta del año gravable 2016 es la debida consecución de documentos soporte y la preparación de anexos que expliquen al máximo el detalle de los renglones del formulario bajo el cual las personas naturales presentarán su declaración.
La educación es uno de los ejes fundamentales para el progreso de un país, por ello, es necesario que los profesionales, además de tener grandes trayectorias académicas, estén dispuestos a actualizarse constantemente para que exista calidad y pertinencia en el quehacer profesional.
La DIAN no parece ser un aliado para los contadores públicos. Mientras la entidad limita la publicación de la información que necesitan los contribuyentes para cumplir a tiempo con sus declaraciones, a los profesionales contables les toca correr.
Es posible que después de la fecha de cierre se presenten hechos importantes que afecten la imagen fiel de la situación financiera o de los resultados. Si esto sucede, deberían modificarse los estados financieros o, por lo menos, hacerse las debidas revelaciones al presentarlos.