Para el impuesto de renta de personas naturales del año gravable 2020 se aplicarán por primera vez las disposiciones de la Ley 2010 de 2019, por lo que deberá prestarse especial atención a la depuración de las rentas cedulares.
Para Felipe Noval, el piloto de criptoactivos surge para medir la efectividad de los desarrollos tecnológicos en la verificación de la identidad digital y trazabilidad en las transacciones.
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Para el impuesto de renta de personas naturales del año gravable 2020 se aplicarán por primera vez las disposiciones de la Ley 2010 de 2019, por lo que deberá prestarse especial atención a la depuración de las rentas cedulares.
El impuesto al patrimonio es un Impuesto directo, general y personal que grava la propiedad o posesión de bienes o riqueza, recayendo sobre su valor neto, con carácter periódico. Para los años 2020 y 2021, este impuesto fue establecido por la Ley 2010 de 2019.
En el Concepto 472 de 2018, el CTCP recomienda que las criptomonedas se contabilicen en una categoría separada de los activos; esto contrasta con lo que plantea el CINIIF, que sostiene que deben contabilizarse como intangibles o inventarios, según la NIC 38 o la NIC 2, respectivamente.
De acuerdo con el artículo 689-2 del Estatuto Tributario, modificado por la Ley 2010 de 2019, el beneficio de auditoría consiste en disminuir el término de firmeza de la declaración de renta para los años 2020 y 2021; además, se menciona qué requisitos se deben cumplir para obtener este beneficio.
La información exógena es un reporte que debe entregarse periódicamente a la Dian en el que se detallan las operaciones realizadas con terceros, cuya utilidad es la fiscalización mediante el cruce de información.
El impuesto de industria y comercio debe pagarse en el municipio donde se ejerce la actividad gravada, de conformidad con lo establecido en el Decreto Ley 1333 de 1986 y en la Ley 1819 de 2016.
Los hechos posteriores suceden después de la fecha del cierre contable y después de la emisión de los estados financieros. La NIA 560 establece normas y proporciona lineamientos sobre la responsabilidad del revisor fiscal respecto de los hechos posteriores.
El formulario 110 debe ser utilizado por las personas jurídicas nacionales o extranjeras al momento de presentar ante la Dian el impuesto sobre la renta, al igual que las personas naturales o sucesiones ilíquidas que califican como no residentes para efectos fiscales.