Hablar de formalización empresarial es sinónimo de bienestar para los trabajadores, factor que Fedesarrollo analiza desde cuatro dimensiones: ingresos, estabilidad, horarios y satisfacción laboral. ¿Cuál es el sentir de independientes del sector formal, de informales y de dependientes?
Hablar de formalización empresarial es sinónimo de bienestar para los trabajadores, factor que Fedesarrollo analiza desde cuatro dimensiones: ingresos, estabilidad, horarios y satisfacción laboral. ¿Cuál es el sentir de independientes del sector formal, de informales y de dependientes?
En los últimos años, la formalización empresarial se ha convertido en un instrumento para mejorar la calidad de vida de los trabajadores y la distribución de bienes públicos, y/o para eliminar distorsiones en el mercado que afecten la productividad de las empresas. El anterior es uno de los varios argumentos planteados por Fedesarrollo en su publicación Informalidad empresarial en Colombia, a cargo de la autora Cristina Fernández.
En esta investigación, se analizan algunas ventajas de la formalización empresarial desde el punto de vista de los trabajadores, del Estado y de las mismas empresas. «Una de las principales razones por las cuáles podría ser importante impulsar la formalidad empresarial es el bienestar de los trabajadores, que puede analizarse en cuatro dimensiones: los ingresos laborales (incluyendo contribuciones laborales y afiliaciones a riesgos profesionales y cajas de compensación); la estabilidad; el horario de trabajo, y la satisfacción laboral», explica el estudio.
La investigación de Fedesarrollo plantea la posibilidad de que los trabajadores independientes del sector formal cuenten con un mayor bienestar en su trabajo que sus pares informales, porque reciben mayores ingresos o porque tienen mayor educación, más que por las características propias del trabajo formal.
«En el año 2015, los trabajadores independientes del sector informal ganaban una suma mensual equivalente al 45 % de los ingresos de los trabajadores del sector formal. Además, los trabajadores independientes del sector formal se encuentran más satisfechos con su trabajo que los del sector informal», describe la publicación.
Como conclusión, se puede afirmar que los trabajadores independientes del sector informal tienen un bienestar laboral menor al de sus pares del sector formal porque:
Sin embargo, su nivel de satisfacción laboral no varía mucho respecto al de los trabajadores del sector formal, y en general es superior al de los trabajadores dependientes, lo que puede explicarse, como ya hemos señalado, por el supuesto mayor uso de sus destrezas físicas e intelectuales.